Más allá de la creación de relojes y joyas excepcionales, la búsqueda de la felicidad siempre ha sido una parte integral del espíritu familiar que caracteriza a Chopard. Un valor universal que trasciende las barreras culturales, lingüísticas, generacionales y sociales, la felicidad une a toda la humanidad. Al elegir celebrarlo, Chopard pretende mostrar su fe en la humanidad; y en el contexto actual, expresa con más fuerza que nunca su propio optimismo intrínseco.
El 20 de marzo, fecha fijada por Naciones Unidas para conmemorar el Día Internacional de la Felicidad, Chopard hace un llamado a la humanidad para crear una cadena global de felicidad. Para simbolizar su compromiso, un arreglo de rosas caracterizará las acciones de la Maison en este día tan especial. Más que un proyecto, esta ambición es un nuevo hito en una línea de tiempo en curso de medidas concretas ya tomadas por Chopard y su dirección durante varios años.
El Día Internacional de la Felicidad es el resultado de una iniciativa de Bután, país que desde la década de 1970 ha privilegiado el índice de Felicidad Nacional Bruta (FNB) sobre el índice del Producto Interno Bruto (PIB). A instancias del gobierno de Bután, altos funcionarios del gobierno junto con representantes de organizaciones religiosas, universidades y la sociedad civil se reunieron en 2012 en la sede de las Naciones Unidas. Su objetivo era desarrollar nuevas herramientas para medir la calidad de vida y llegar mucho más allá de un paradigma puramente económico. En su resolución del 12 de julio de 2021, la Asamblea General de las Naciones Unidas afirmó que “la búsqueda de la felicidad es un objetivo humano fundamental”, al tiempo que tomó la iniciativa de instituir un Día Internacional de la Felicidad el 20 de marzo de cada año. A través de esta agenda, llama a realizar actividades de sensibilización en todos los niveles de la sociedad. Chopard ha respondido naturalmente a este llamado universal, ya que incluso antes de que las Naciones Unidas institucionalizaran este día en particular, la Maison ya estaba comprometida con la promoción de este valor intrínseco de su historia e identidad.
De cara a las festividades previstas para el 20 de marzo, la Maison fijó el objetivo de lanzar una cadena de felicidad por todos los continentes, para recordarnos lo esencial que es la felicidad en la vida. Este día tiene un significado simbólico esencial: coloca la felicidad en la agenda de los medios y nos recuerda que las condiciones para su aparición son un asunto público del que somos colectivamente responsables. Todo el mundo sabe intuitivamente cómo discernir los contornos de la felicidad: es reconocible por lo que se desarrolla dentro de nosotros cuando está a nuestro lado por unos momentos. De repente, todo parece estar al alcance de la mano. Por el milagroso intermediario de un baile, la integridad de una decisión o una simple carcajada, todo parece posible. De esta manera, Chopard llama a todos a redescubrir estas emociones y formar una verdadera cadena de felicidad. Un efecto mariposa mediante el cual una sonrisa o un gesto dirigido a los demás –e incluso a uno mismo– se multiplica por todo el mundo, no sólo un día, sino todos.
El rostro de las colecciones Happy Sport y Happy Diamonds desde 2021, la embajadora mundial de Chopard, Julia Roberts, es ahora la musa de todas las colecciones de joyería y relojes de lujo para mujer de la Maison. Para celebrar este vínculo especial, Chopard y Julia Roberts están combinando su amor compartido por el cine a través de una impresionante campaña orquestada por James Gray.
Con una hermosa caja en color rosa mexicano, Chopard celebró el Día Internacional de la Felicidad, recordándonos a todos lo importante que es la felicidad. En una tarjeta preciosa donde Catherine Scheufele, escribe sobre su concepto de felicidad en unas hermosísimas palabras, ella se decidió por la rosa para simbolizar el compromiso de Chopard de promover el Día Internacional de la Felicidad, una elección guiada por múltiples motivos sinceros. Por un lado, la rosa es una de las flores favoritas de la directora artística y copresidenta de Chopard, amante de la naturaleza. La forma de los pétalos recuerda la forma de un corazón, uno de los símbolos de Chopard. Además, el color rosa en sí mismo evoca suavidad. Para el Día Internacional de la Felicidad, la Maison se vestirá de infinidad de rosas. A través de sus boutiques y talleres, la rosa destilará su fragancia de frescura y Joie de Vivre para formar la cadena de felicidad que pide Chopard.
Desde la invención de Happy Diamonds, los talleres de Chopard siempre han atribuido una virtud pacificadora a los diamantes que bailan: la sonrisa que suscita el torbellino de diamantes que giran libremente está destinada a inspirar otras nuevas. Desde los vaivenes de la emancipación de la mujer a los que han acompañado, hasta la búsqueda universal de la felicidad, los diamantes danzantes pretenden contribuir al desarrollo y expansión de un mundo más justo, guiados por las nociones fundamentales de la identidad de Chopard: la felicidad y la alegría de vivir.