En verano o en pleno invierno con temperaturas que llegan a los -15 grados los montrealeses no se quedan en casa sufriendo por el frío, menos si existen refugios de bienestar como el Spa Bota Bota que se ubica en un impactante barco en el río San Lorenzo.
En Montreal se toman muy en serio el tema del bienestar y de los espacios que se requieren para esto. Al parecer la felicidad y calidad de vida que todos envidiamos de Canadá se trabaja en todos los aspectos.
Uno de ellos y que conocimos muy de cerca es este asombroso spa urbano llamado Bota Bota, que se ubica a unos 20 minutos casi de cualquier punto de la ciudad y es un viejo barco remodelado para un spa de lujo.
El spa cuenta con todo lo necesario para un citadino que necesita consentirse, apapacharse, pero especialmente que está consiente de que debe de invertir en ello.
En Montreal los viernes es casi una visita obligada ir a este lugar. Hombres y mujeres, especialmente entre los 35 y 45 años se dan cita a este barco con previa reservación. La gran mayoría de ellos asisten solos, otros tantos en pareja o con amigos.
Los tratamientos que se ofrecen en Spa Bota Bota no son diferentes a los de otros spas, sin embargo el circuito de agua tiene algo especial. El spa tiene todas las indicaciones para que lo realices y la siguientes áreas: sauna, vapor, vapor seco, chapuzón valiente en agua fría, bañera nórdica, piscinas de hidromasaje con una espectacular vista a la ciudad o a un viejo embarcadero salido de una película rusa. Siguiendo las recomendaciones estás de regreso a la vida.
El área de relajación es encantadora. Cada una está diseñada para como te sientas en ese momento, para compartir o para simplemente disfrutar de la soledad y el silencio, sí, el silencio es la parte más importe de este lugar.
Puedes recostarte en un camastro viendo hacia el río completamente congelado, tirarte en una ventana del barco o reposar en una camas tipo hamacas.
Para los que quieran seguir con la experiencia healt and beauty, pueden acceder a un menú especial, un brunch en pareja, servicios de belleza y clases de yoga y pilates.
Eso sí, no dejan tomar fotos, de hecho te piden que dejes tu celular y te concentres en las actividades que se ofrecen. Te prestan una bata de baño, una llave para guardar tus cosas y vualà!
Durante el verano Bota Bota tiene un ambiente distinto, se suman lugares para hacer parrilladas con enormes mesas de madera afuera del spa, la gente toma sol y se realizan actividades acuáticas en el río. Pero durante el invierno tiene un encanto único.
Los spas urbanos tiene algo realmente especial en todas las ciudades, y es que te hacen reconciliarte con tu entorno que muchas veces nos resulta estresante. No puedo decir lo mismo de Montreal, un lugar que comparado con el DF es casi como vivir en una montaña con algunos vecinos. Sin embargo, para los Montrealeses no es un evento especial asistir a lugares como el Spa Bota Bota, tiene que ver más con una necesidad de vivir experiencias que los hagan sentir plenos, eso a lo que hoy llamamos LUJO!