A los 79 años, y presuntamente a causa de las secuelas de una caída que sufrió en septiembre, murió Diane Disney, la única hija con vida de Walt Disney.
El periódico Los Angeles Times informó que Diane falleció en su domicilio en el Valle de Napa, en el norte de California.
Disney estaba casada con Ron Miller, ex presidente de The Walt Disney Company, y en 2012 concedió a la agencia española Efe una de sus últimas entrevistas, donde recordó cómo era su padre y cómo éste vivió el éxito de sus personajes hasta llegar a hartarse de la icónica Blancanieves.
«Me llevaba a mí a mi hermana Sharon al carrusel en el Parque Griffith y se quedaba ahí parado todo el día hasta que se nos daba la gana irnos», dijo entonces, recordando a su padre con varias imágenes:«Mientras estaba parado ahí él seguía pensando que debía haber más actividades disponibles para que los padres y los hijos las hicieran juntos, y así surgió la idea de Disneyland».
Diane fue la mayor de las dos hijas que tuvo Walt Disney con su mujer Lilian, mientras que la pequeña, Sharon, murió en 1993.
Diane dedicó buena parte de su vida a la filantropía, a la producción de vino en sus bodegas Silverado Vineyards y jugó un papel crucial para conseguir que el arquitecto Frank Gehry se encargara de diseñar el icónico auditorio angelino que lleva el nombre de su padre, el Walt Disney Concert Hall.
Robert A. Iger, presidente y director general de la empresa, dijo que Diane «será recordada por su gracia y generosidad así como su trabajo incansable para preservar el legado de su padre».
«Como la amada hija de Walt Disney y una de sus inspiraciones para crear Disneyland, tiene un lugar especial en la historia de The Walt Disney Co. y en los corazones de los admiradores de todas partes», añadió.