El clip de «Applause», tema anticipo de ARTPOP, el próximo disco de Lady Gaga, ha significado un verdadero éxito, aunque no fue un récord en la competencia musical por ser el video más visto tras su estreno.
En el video, la reina del pop se presenta tan extravagante como nos tiene acostumbrados, con la cabeza en el cuerpo de un cisne negro, y ni siquiera con el trabajo de sus fans ni con Haus of Gaga logró su objetivo.
La artista, que vendió un millón de copias en una semana de su álbum «Born this way», logró, según marcaba el contador al cumplirse las 24 horas en la red, unos siete millones de visitas, lejos de los más de doce millones de reproducciones que recibió «Best song ever» de One Direction en ese plazo.
El terreno principal de juego se llama Vevo, la herramienta que, sobre la infraestructura de Youtube, crearon en 2009 Sony, Universal y varias compañías más para administrar directamente sus videos.
Muchos usuarios la utilizan como «la nueva MTV» y construyen en ella sus «playlist», esto es, sus listas de videos favoritos en cadena, hasta el punto de que la revista Billboard, responsable de las clasificaciones oficiales en Norteamérica, combina sus resultados con los de las ventas para publicar los «hits» más exitosos de la semana.
Sin embargo, existen siempre sospechas respecto de la utilización de tácticas de empresas, las cuales ayudan a terceros a incrementar su visibilidad en las redes sociales, por ejemplo con perfiles falsos de usuarios, que se afilian a la cuenta de un artista pero que no pertenecen a ninguna persona real, sino que han sido creados masivamente por una máquina.
Bill Werde, director editorial de Billboard, acaba de denunciar a través de su cuenta de Twitter un intento de inflar las cifras de «Applause» con medios poco ortodoxos.
«Un artista que tuitea o pone en su cuenta de Facebook un enlace que permite que un fan le dé play y deje su computadora funcionando solo no es la esencia de lo que valoramos en nuestras listas», escribió, quejándose de que un enlace difundido y posteriormente suprimido por Gaga de su cuenta de Twitter conducía a un «playlist» con el video de «Applause» repetido unas 150 veces.
No es la primera vez que la sombra de la duda esta en Lady Gaga. La compañía Status People testó hace meses la calidad de sus seguidores en Twitter y afirmó que un 70 por ciento de ellos estaban inactivos o eran falsos.
Asimismo, Youtube le restó hace no mucho 156 millones de visionados de su canal oficial bajo la excusa de que ya solo se contabilizan las reproducciones de videos que actualmente estén colgados. Algunos medios lo achacaron a «prácticas fraudulentas».
Sólo en este verano, el «video más visto en las primeras 24 horas» ha cambiado tres veces de manos. Así, los 10,6 millones de reproducciones del «Beauty & a beat», de Justin Bieber, fueron destronados en junio por el grotesco video de Miley Cyrus «We can’t stop», con 100 mil visitas más, que a su vez fue desplazada en julio por la citada «boy-band» británica.