Sin el glamour ni la sofisticación de un Porsche, ni de los exclusivos Ferrari o Lamborghini, el Shelby Mustang se convirtió en uno de los autos americanos más queridos y apreciados por los fanáticos de los coches.
Una preferencia por algunos de estos modelos han puesto en la cima de la lista de más vendidos verdaderas joyas, autos de culto como el Shelby GT500 o el Shelby Green Hornet de 1968.
Sin embargo, el récord de precio pagado por uno de estos carros lo ha conseguido un ejemplar del Shelby Ford Mustang de 1967, adquirido por un coleccionista privado en la sensacional cifra de 1.3 millones de dólares.
La venta se llevó a cabo en la casa de subastas Mecum´s Spring Classic Auction, convirtendo dicha transacción en la más cara de la historia para un Mustang.
Pero, ¿qué llevó al misterioso comprador a desembolsar una cifra nunca antes pagada por un coche de estas características? No sólo su diseño, la belleza de este auto considerado como uno de los preferidos por generaciones, sino también el hecho de que es el Shelby más rápido de los años ´60, y el único ejemplar que puede encontrarse por estos días.
El Shelby GT500 subastado en una cifra astronómica incorpora el mismo motor V8 que se usó en su momento para darle vida al GT40 MkII, además de neumáticos Goodyear Thunderbolt originales en perfecto estado.
Un poco de historia
Los máximos mandatarios de Ford querían ver a su Mustang compitiendo directamente con sus rivales en un circuito profesional, y para ello recurrieron a Carroll Shelby, un ex-corredor que fabricaba prototipos de carreras y competición conocidos como Cobras.
Shelby tenía algún contacto de negocios con Ford Motor Company, y así surgió el fastback como un tercer tipo de carrocería para el Ford Mustang en 1965, que es la carrocería base sobre la cual se crea el Shelby GT350.
Los diseños originales del Ford Mustang fueron un éxito, sin embargo, el modelo que ha perdurado como un clásico de la familia Mustang es, sin duda, el Ford Mustang Shelby GT500.
Con Carroll Shelby al frente del programa de carreras de Ford, se hicieron famosas las distintivas bandas blancas que cruzaban a sus coches modificados como el también famoso Ford GT40.
El debut del Mustang Shelby GT350 fue en enero de 1965, obteniendo su primea victoria a un mes de ganar su primera carrera en Green Valley, Texas.
En noviembre de 1966, Shelby lanzó el legendario Mustang Shelby GT500 y para febrero de 1970, tras la caída en la venta de automóviles de competencia de la línea Ford-Shelby, Ford concluye el contrato con Carroll Shelby.