El niño Harry Potter ha tenido un pasado muy oscuro. El protagonista de la saga del niño mago, Daniel Radcliffe admite que a pesar de ser ahora abstemio fue tan dependiente del alcohol que solía llegar al rodaje aún bebido.
«No quiero entrar en detalles pero bebía mucho, y era diariamente, bueno, por la noche. Puedo asegurar que nunca bebí durante el trabajo en ‘Harry Potter’. Sí que fui a trabajar todavía borracho, pero nunca bebí en el trabajo. Puedo señalar muchas escenas en las que estoy fuera. Tengo los ojos idos», confesó.
Así, Radcliffe, de 22 años, dejó de beber porque no le gustaba la persona en la que se estaba convirtiendo.
«Me encantaba el hecho de que de repente podía hablar con la gente y me sentía tan divertido y tan interesante. Pero después, vives tras una enorme nube de vergüenza por lo que has hecho y el temor de a quién podrías ver, que les podrías haber dicho y que podrías haber hecho con ellos. Tienes que cambiar algo o vivir con esa vergüenza, y no estaba dispuesto a eso a los 21», añadió el actor.
