El estado de Alaska en Estados Unidos, se encuentra situado en el extremo noroeste del continente americano. El litoral de Alaska está recortado por fiordos y hay numerosos parques nacionales, siendo el estado americano que más parques naturales posee.
El descubrimiento de yacimientos petrolíferos ha permitido un enorme crecimiento económico en Alaska durante las últimas décadas, pese al aislamiento geográfico y a las duras condiciones de vida.
El invierno es glacial y entre el 24 de noviembre y el 18 de enero no sale el sol ni una vez. Sin embargo, se pueden contemplar las famosas auroras boreales desde el centro y el norte del Estado. Este fenómeno mágico hace por sí mismo que el viaje valga la pena.
En el parque nacional del valle de Nobuk, podemos encontrar dunas de arena que alcanzan los 30 metros de altura. Otro parque interesante es el de Kenai Fjords National Park, situado al sur, cubre una superficie de más de 2.300 Kilómetros cuadrados y alberga numerosas especies de mamíferos marinos.
Este inhóspito estado también contiene a la montaña más alta de América del Norte, se trata del Monte McKinley con 6.194 metros de altura. Cada vez más personas viajan a Alaska para dedicarse a la caza o a la pesca, especialmente en el puerto de Anchorage.