Una forma de complementar tu rutina de belleza es a través de una máscara facial. Estos tratamientos se aplican para limpiar, nutrir o purificar la piel. Su diversidad es infinita y depende del tipo de piel y las necesidades de cada mujer.
Dicho ritual se recomienda al menos una vez a la semana y siempre acompañado de tu rutina diaria de limpieza y humectación. La mascarilla de arcilla es perfecta para piel grasa o con acné. Ayuda a limpiar el rostro, eliminar imperfecciones y prevenir la formación de granitos.
Su aplicación es muy sencilla. Pond’s nos compartió los siguientes pasos:
1. Limpia tu rostro con una espuma facial para retirar las impurezas del rostro.
2. Mezcla una porción de arcilla con agua hasta lograr una consistencia pastosa y espárcela sobre la cara y cuello. Puedes potencializar los efectos de la mascarilla si la combinas con aceites esenciales como el árbol del té.
3. Déjala actuar por 20 minutos.
4. Retira con agua tibia y complementa con un tónico que te ayude afinar los poros.
5. Continúa con tu rutina diaria de belleza y aplica una crema o gel humectante.