Si tu vida sentimental es un desastre, o te encuentras frustrado por no encontrar el amor que tanto sueñas, no te preocupes: Tinder será tu mejor asesor amoroso.
Y no se trata de un humano con experiencia en corazones, sino de una aplicación de citas en línea que presume de sus 450 millones de «aceptaciones» y «rechazos» diarios.
¿Cómo funciona Tinder? Lo hace de la siguiente manera: la aplicación muestra una imagen de una potencial pareja (hombre o mujer), junto a con su edad e información que públicamente haya compartido en redes sociales. Si usted comparte amigos en Facebook con esa persona, por ejemplo, la aplicación se lo hará saber, .
Ahora bien, si no le agrada el aspecto de la persona sugerida, podrá deslizar su dedo a la izquierda, y no volverá a ver su perfil, y deberá hacerlo hacia la derecha en señal de aprobación, si le gusta lo que está viendo.
Es decir, Tinder comunica a los dos usuarios y permite el contacto sólo cuando ambas partes aprueban el perfil de la otra persona.
Sean Rad, confundador de la aplicación, asegura que el tamaño de la red Tinder está creciendo un 15% cada semana, aunque no especifica el total de usuarios que actualmente alberga, convirtiéndola en una de las compañías más populares entre las llamadas start-ups.
La aplicación, según Rad, resuelve «el problema que tiene la humanidad, ya que conocer gente nueva era un problema en general del que nadie hablaba», añadiendo que la forma de socializar ha cambiado: «Antes íbamos a un bar a conocer a gente. Ahora vamos para pasar tiempo con nuestros amigos», aseguró.
Rad cuenta que «una de las cosas que oímos todo el tiempo -especialmente de las mujeres- es que en el mundo real, cuando alguien se acerca a ellas -aunque fuera la persona más interesante de la sala- sienten que su espacio personal está siendo invadido y se sienten abrumadas».
«Ocurre entonces que las personas que están interesadas acaban por sentarse y deciden ser introvertidas y no lo intentan», explica.
Sin embargo, Tinder ha sido descrita por algunos como «espeluznante» y «una aplicación para tener relaciones sexuales informales que nos hace más egoístas».
La aplicación móvil está respaldada financieramente por IAC, el gigante mediático dueño también de match.com y OkCupid, entre otras webs de citas.