La chef Mónica Patiño junto con su hija Micaela Miguel, una vez más le dieron a la colonia Roma una nueva alternativa gastronómica, en esta ocasión un poco más cercana a las historias culinarias de su hogar, que también se ubica en el legendario barrio.
Mónica Patiño se crió en la colonia Roma, sus padres y abuelos ahí vivieron inolvidables momentos gastronómicos que mezclaban sabores de comida francesa y mexicana.
La chef, que se distingue por recuperar sabores del pasado, no dudó ni un instante en sacar las historias y llevarlas a una vieja casona que además se ubica arriba de su “primer hijo” gastronómico en la colonia: “Delirio”, un bistró y tienda gourmet.
Resulta que esta maravillosa propiedad de casi 100 años de antigüedad, es de los mismos dueños del local de “Delirio”, ahí vivía la señora Virginia junto con su esposo. Hace algunos años que la pareja murió y dejó la casa a sus hijos y nietos. Ellos, que ya tenían contacto con la chef Mónica Patiño, le propusieron seguir con el legado gastronómico y le ofrecieron la casa.
Mónica Patiño, conoció la casa y se llenó de recuerdos, pues era muy parecida a la de sus abuelos y padres. De ahí la inspiración para que la chef decidiera darle un concepto único.
Casa Virginia, bautizada así el honor a la antigua dueña de la casa, tiene como objetivo ser todo menos un lugar pretencioso. Aquí, se viene a comer, a compartir, a tener interminables sobremesas llenas de platos, agua y copas de vino, sí, justamente como si estuvieras en una cena casera.
En Casa Virginia; se comparten los platos y se disfrutan de las recetas de la familia Quintana con aquella “tropicalización” mexicana que se hacía en la cocina.
No hay un menú fijo, ni tampoco una enorme carta, de hecho se planea estar rotando los platos continuamente. Hay buenos vinos mexicanos y obviamente franceses. Las mesas son amplias para poder compartir con amigos y familiares.
Casa Virginia, también cuenta con un huerto en la azotea, que abastece lo suficiente para tener en tu mesa una ensalada fresca.
La casona fue arreglada lo suficiente para recibir invitados, pero en general está muy bien mantenida. Techos altos, pisos de duela y paredes blancas, destacan en los cuartos.
En la parte de abajo de la casa, se encuentra la cocina. Desde aquí dirige la chef y su hija Micaela a los cocineros en su mayoría jovenes. Sin embargo, no es extraño que ambas chefs pasen a saludarte o a levantarte el plato a tu mesa.
Hay cuartos más privados por si prefieres hacer una reunión intima y se puede rentar la casa para eventos especiales.
Por ahora, Casa Virginia está en “soft opening” y abre de miércoles a domingo, (miércoles a viernes solo cenas) sábados y domingos Bruch desde las 12 con comidas y cenas.
El cheque promedio es de 350 a 500 pesos ya con bebidas incluidas.
Casa Virginia: Av. Monterrey 116, esq. Álvaro Obregón.
Reserva al 5207 1813
El restaurante cuenta con servicio de valet parking y está justo arriba de Deliro, la entreda está en Monterrey.