Mediante el uso de un georradar, expertos detectaron anomalías en un par de cavidades del Templo de las Inscripciones de Palenque, en Chiapas.
Un comunicado difundido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) asegura que las anomalías detectadas corresponden a un par de cavidades de entre dos y tres metros en la parte frontal del templo y la corroboración de que la cripta de Pakal II no descansa sobre la roca original, lo que indica que la cámara funeraria no fue el punto de partida para levantar la construcción maya, como sugirió el arqueólogo y descubridor, Alberto Ruz Lhuillier.
En los trabajos recién efectuados, se utilizó la técnica de tomografía eléctrica con el objetivo de encontrar en la parte posterior del Templo de las Inscripciones, en una sección de 40 m largo y a una profundidad de 10 m, las posibles fuentes de humedad que afectan el interior de la cripta de Pakal y para saber su relación con la arquitectura del edificio.
El doctor Maksim Bano, quien ha colaborado con proyectos arqueológicos en diversas partes del mundo, dijo que su participación en una de las ciudades más importantes de la cultura maya no se limita a conocer el aspecto físico del subsuelo del Templo de las Inscripciones, sino también “los secretos que pueda guardar la cámara funeraria de un personaje como Pakal”.
Dato: En este proyecto binacional colaboraron el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el Centro Nacional de la Investigación Científica (CNRS) de Francia.