Pocos equipos en la historia del futbol mundial han despertado tanta admiración como el Barcelona, equipo que lo ha ganado todo con un juego de altísimo nivel.
Pero no sólo dentro de un campo de juego el Barcelona ha sido líder indiscutido, sino también en cuanto a su capacidad innovadora en el terreno de la tecnología.
Por ejemplo, una de las vías a través de las cuales se comunica el club con los seguidores del equipo catalán es a través de las aplicaciones móviles. El club cuenta con un programa de desarrollo de apps mediante el cual se asocia con desarrolladores independientes para crear productos oficiales.
¿Cómo funciona? Los programadores envían su idea de aplicación para dispositivos iOS o Android y, tras un proceso de selección, el Barcelona elige las mejores y las convierte en productos oficiales.
Estas apps hacen uso de la historia del club y de la imagen de sus jugadores más famosos, como Messi, Iniesta o Puyol, y a cambio el club y el desarrollador se reparten los ingresos generados por la aplicación.
Una de estas aplicaciones es FCB Capball, una app para iOS inspirada en el tradicional juego infantil del fútbol de chapas o tapones de botella que al mismo tiempo enseña a los usuarios la historia del Barcelona a través de sus jugadores de todos los tiempos.
El presidente de la institución «culé», Sandro Rosell, asegura que «es crucial estar pendiente de la nueva tecnología y los medios sociales porque es la mejor de aumentar nuestros fans y acercarnos a ellos».
El club también se encarga de promover las aplicaciones en sus cuentas de redes sociales, que cuentan con más seguidores que cualquier otro equipo del mundo.
Pero el presidente del Barcelona quiere asegurarse de que este contacto digital con sus fans también se traslade al mundo real. «Hay que hacerlo con mucho cuidado, porque lo que más nos gusta es el contacto directo con nuestros seguidores, el contacto humano, verles las caras, saber quiénes son, dar un abrazo a nuestros socios, y eso no es posible a través de los ordenadores», dice Rossell.
Por su parte, Miguel Muñoz, desarrollador de FCB Capball, dijo que «desde el primer momento el FC Barcelona se puso a mi disposición para ofrecerme todos los recursos necesarios para documentar la app». Dicha app lanzó su primera versión en catalán, castellano, inglés y chino.
«China en muy poco tiempo ha pasado a ser uno de los mercados más importantes en el mundo de las aplicaciones», agrega Muñoz.
Al recurrir a programadores independientes, el Barcelona puede ofrecer una gama mucho más amplia y variada de aplicaciones de lo que uno esperaría.
En tal sentido, Didac Lee, director de tecnología del Barcelona e impulsor de este programa de aplicaciones, que ya cuenta con 11 de estos productos, comentó que «una de ellas es una aplicación de ejercicio, una especie de entrenador persona. Supongo que nunca hubiéramos tenido una app de entrenamiento personal».