Considerado por muchos el «campeón sin corona», vivió a la sombra de la gloria del argentino Juan Manuel Fangio. Sin embargo, el ex piloto de F-1 Stirling Moss pareciera querer coronarse como uno de los personajes más polémicos del automovilismo internacional.
Moss generó la irritación y el enfado de las mujeres -en particular de aquellas que luchan por un lugar en la Fórmula Uno- al asegurar que «sería muy difícil para una mujer afrontar de manera práctica el estrés mental que supone correr en Fórmula 1. Yo no creo que tengan aptitud para ganar una carrera de Fórmula Uno”.
Claro que las reacciones no tardaron en llegar. La primera voz que se oyó fue la de Susie Wolff, piloto de desarrollo del equipo Williams, quien comentó que se quedó estupefacta al escuchar los comentarios del inglés: «Estoy totalmente en desacuerdo con él. Me avergüenza escuchar eso. No sé por dónde empezar después de escuchar esa entrevista. Le tengo mucho respeto a Stirling y a lo que ha conseguido, pero creo que estamos en una generación diferente”, dijo.
Indignada, Wolff aseguró que la época de Moss era otra. “Para Moss, es increíble que una mujer condujera un F1. En los días en que corrieron ellos, cada vez que su subían al coche ponían su vida en peligro. Pero la F1 ha avanzado mucho a nivel tecnológico, es mucho más segura que antes», añadió.
Antecedentes
Las polémicas declaraciones del ex piloto británico no son las primeras que muestra su grade de «machismo». No hace mucho tiempo, aseguró que no quería «que un maricón haga de mí en una película», al referirse a la elección de un actor homosexual para representarle en un film sobre su vida.
Hasta el momento, sólo una mujer en la historia logró puntuar en la tabla en un campeonato de la máxima categoría del automovilismo internacional. Fue la italiana Lella Lombardi, quien obtuvo medio punto tras finalizar en el sexto lugar en Madrid, en 1975.