Durante su paso por el programa de Jimmy Kimmel, el actor inglés apareció más suelto que de costumbre.
Robert Pattinson acudió al show tras haber bebido vodka y su torpeza al iniciar el programa permitió al presentador del espacio bromear con él diciendo que había oído que llevaba unos zapatos grandes. «Vodka y zapatos grandes son una mala combinación», concluyó Pattinson. «Es por eso que los payasos no se emborrachan», le respondió Kimmel.
Ya con las piernas cruzadas y sobre el sillón de invitado, Pattinson sacó adelante una entrevista desinhibida en la que contó detalles sobre la más reciente entrega de Crepúsculo, Amanecer, y otras cuestiones personales.
Sin duda, Robert Pattinson se comportó como un auténtico cómico en televisión.
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