Alexander McQueen es un diseñador que pasará a la historia como uno de los creativos más arriesgados. Es un ícono de la moda, por eso son cientos los creadores y artistas plásticos los que se han inspirado en él para crear un nuevo proyecto.
Igarashi y Hissa Marakumi Sayuri tomaron uno de los diseños más significativos del diseñador inglés para crear un vestido hecho solo de ositos de goma. Para la creación de este, utilizaron 50 mil ositos de goma de diferentes colores, los cuales fueron pegados a mano en un patrón de colores que recuerda a un arco iris, sobre una lámina de vinilo.
Tres semanas bastaron para que el vestido, que pesa aproximadamente 220 libras, quedara terminado y perfectamente ajustado a las medidas de la modelo Jessica Pitti.
El proyecto se realizó especialmente para el lanzamiento de la revista Twelv.