Su origen no está confirmado, algunos conocedores dicen que se remonta al siglo XVI, pero lo que si sabemos es que este cóctel es uno de los legados cubanos al mundo más populares gracias al escritor americano, quien dejó grabada su predilección por el combinado en el mismo local, La Bodeguita del Medio, donde se inspirara para escribir el gran clasico “El viejo y el mar”.
Acaba de cumplir setenta años, pero ingresar a “La bodeguita del medio”, en La Habana, es como si se detuviera el tiempo y volver decádas atrás, para ser precisos a los años cuarenta y cincuenta, cuando la isla brillaba como el destino turístico preferido entre la clase adinerada americana.
Allí todavía sigue colgado el cuadro escrito a mano de Ernest Hemingway: “My mojito in La Bodeguita, my daiquiri in El Floridita”, que internacionalizó estos dos cócteles, convirtiéndolos en clásicos de todo club de copas.
En el caso del mojito, su origen al día de hoy no está muy claro. Hay quien dice que se creó en la misma Bodeguita, coincidiendo con la ley seca americana (1920-1933) a partir de una receta norteamericana que se hacía con bourbon. Otros dicen que el restaurante tan sólo perfeccionó la receta, le dio el nombre de mojito y lo dio a conocer, ya que existía un brebaje similar desde el XVI, denominado ‘Draque’ porque fue creado por un subordinado del corsario de la corona inglesa Sir Francis Drake con aguardiente de caña, un alcohol predecesor de lo que hoy se conoce como el ron.
La receta original del Mojito es la siguiente: ron, azúcar, limón verde o lima, agua mineralizada y hierbabuena. El ron que se utilizaba era un ron blanco Silver Dry –no añejo-, más seco y que favorecía que se mantuvieran intactos todos los sabores del resto de ingredientes.
Además, la planta que se conoce como hierbabuena en Cuba y con la que se preparaba en un inicio el mojito no era la misma mentolada que la europea, aunque la confusión y los años han hecho que sea esta última la que se utilice ya en todos los preparados –también en la Bodeguita-.
La receta ha ido dulcificándose, ya que en un inicio sólo se echaba media cucharada de azúcar en el preparado, aunque ahora son muchos los locales que agregan mucha más cantidad.
Finalmente, no hay olvidar servirlo en vaso de tubo mediano, siempre beberlo con un popote y, si es frente al mar, que mejor!!!