Para celebrar el lanzamiento en Estados Unidos de la famosa casa de joyas Fabergé y la apertura de su primera boutique en el país, ubicada en 694 Madison Avenue, Nueva York, se organizó un exclusivo evento de celebración, en colaboración con el Jardín Botánico de Nueva York en Rockefeller Center.
La tradicional casa reconocida por sus joyas pero sobretodo por sus huevos de Pascua que son hechos de manera artesanal desde 1885 llega a Nueva York por la puerta grande.
Fabergé con boutiques en Londres, Geneva y Hong Kong, decide abrir su primera boutique en el continente americano con el fin de que los estadounidenses tengan acceso al lujo de sus piezas tan valoradas en todo el mundo.
La nueva boutique ofrecerá a las clientas una gran colección de joyas entre las que destacamos Russian seasons explorada por Peter Carl Fabergé´s en la que muestra brazaletes, anillos, collares, entre otras.
Carl Fabergé fue sin duda uno de los joyeros más ilustres de Rusia. Experto en convivir y crear con piedras preciosas, semipreciosas y metales, y realizaba diseños de diferentes estilos, enre ellos ruso antiguo, griego, renacentista, barroco, Art Nouveau, naturalista y caricaturesco.
Los famosos huevos de Carl Fabergé
Los lujosos huevos que hasta la fecha son las piezas más emblemáticas de la marca comenzaron su camino cuando en la Pascua de 1883 el Zar Alejandro III, le encargó al orfebre Peter Carl Fabergé un huevo para regalarle a su mujer, la zarina María. Para ello Fabergé diseñó un huevo con cáscara de platino que contenía dentro uno más pequeño de oro.
Al abrirse este último, se encontraba una gallina de oro en miniatura que tenía sobre su cabeza una réplica de la corona imperial rusa, el regalo tuvo tanto éxito que la emperatriz ordenó que le regalen uno en cada Pascua. Once fueron en total los huevos que Alejandro III le regaló a su mujer.
Se sabe que desde entonces la casa de joyas Fabergé realizó en total 69 huevos para los zares, la aristocracia y la élite industrial y financiera de los cuales se conservan 61.