Fue y es una de las fotógrafas más controvertidas del siglo XX y el Museo de Arte Moderno de Nueva York hará una retrospectiva de las irreverentes fotografías que Cindy Sherman ha ido tomando en las últimas tres décadas, en las que con la ayuda de pelucas, disfraces, maquillaje o incluso prótesis se transforma a sí misma en inquietantes personajes.
«Retratándose como una mujer de carrera o una rubia platino, una víctima de la moda o un payaso, una aristócrata francesa o una señora mayor de la alta sociedad, durante 35 años esta incansablemente aventurera ha creado un elocuente cuerpo de trabajo que resuena profundamente en nuestra cultura visual», explicó la curadora de la muestra, Eva Respini, en un comunicado.
De esta manera, a través de 170 imágenes, uno se puede adentrar a la carrera de Sherman (Nueva Jersey, 1954) desde sus inicios a mediados de los años setenta hasta la actualidad, durante la cual siempre ha tratado de explorar la construcción de la identidad, la naturaleza de la representación y el arte de la fotografía, según el museo MoMA.
Recordemos que en sus fotos, la emblemática Sherman se convierte en hombres, en Madonna, en prostitutas o en payasos, lo que consigue gracias a múltiples accesorios que pasan por elaborados disfraces, grandes cantidades de maquillaje o hasta prótesis para hacer más voluminosas diferentes partes de su cuerpo.