Durante su décima tercera edición, el Festival Cumbre Tajín que se realizará del 17 al 21 de marzo de 2012 en el Parque Takilhsukut, se confirma como el espacio para la preservación y la difusión del patrimonio. Prueba de ello es Tajín Vive, recorrido nocturno por la ciudad sagrada de «El Tajín«.
Cada noche del Festival, como inicio del recorrido Tajín Vive, los pájaros Totonacas que encarnan la Ceremonia Ritual de Voladores refrendan el pacto atávico con el cosmos en la entrada de la zona arqueológica El Tajín.
Presenciar el rito a la luz de la luna es, de manera metafórica, pararse ante el umbral de su cultura. Adentrarse en la Ciudad Sagrada durante el recorrido nocturno es, literalmente, viajar a través de ella.
La experiencia, profunda e inolvidable, permite el contacto directo de los visitantes con la atmósfera, las deidades y los habitantes de una cosmogonía única, la Totonaca, en el punto neurálgico de esta cultura viva.
Durante este proceso, la imponente Ciudad Sagrada se muestra en toda su dignidad, valor histórico, simbolismo e integridad física.
Así, la Ciudad Sagrada luce su magnificencia: templos iluminados, danzas, cantos, poesías y ceremonias tradicionales crean una ruta para compartir los misterios de una civilización fascinante, a través de áreas delimitadas y custodiadas.
Don Juan Simbrón, líder espiritual del Totonacapan explica la importancia de esta ciudad para la cosmogonía: “Ahí donde está la zona arqueológica de El Tajín, en la Pirámide de los Nichos, ése es el centro ceremonial más importante de la cultura Totonaca, porque ahí está la cuna de la sabiduría. Muchos años atrás, la pirámide estaba construida con madera fina, pero un día nuestro sabio Dios la convirtió en piedra, y desde entonces se le conoce como la piedra que humea, porque desde la cumbre de la pirámide se realizaban las ceremonias de pedimentos a un ser supremo, al ser creador”.