Diesel lanza una nueva fragancia que promete conquistar a amantes del amor en el mes de enero.
«Loverdose» se describe como una fragancia “romántica y atrevida a la vez… Bella pero seductora y dispuesta a encender las pasiones como nunca antes”
Según los creadores de esta fragancia contiene ingredientes que estimulan el hipotálamo, la parte del cerebro responsable de la atracción y la lujuria.
Esta fragancia destila flores especiadas, anís estrellado y mandarina, para luego darle paso al jazmín, gardenia y regalíz y finalmente cerrar con notas de ámbar, maderas y vainilla.
La botella es realmente llamativa. En color morado y forma de corazón con una flecha atravesada que sale de la tapa es uno de sus principales atractivos.
La embajadora de esta fragancia es la top model Ashley Smith, famosa por su sonrisa y espontaneidad.
Maestros de la gastronomía molecular como Olivier Cresp y Honorin E Blanc han elaborado la fragancia «Loverdose» en el secreto de una cocina en ebullición que aquí te presentamos.
En Exclusiva, nos brindan la receta de esta fragancia oriental, amaderada y golosa. (Se puede consumir con moderación). Los creadores declinan toda responsabilidad en caso de desarrollarse una adicción fuerte a este elixir.
Ingredientes:
-3 palitos de regaliz narcótico
-4 gotas de licor de regaliz embriagador
-3 estrellas de badiana
-3 cucharadas de pétalos de jazmín Sambac luminoso
-1 vaina de vainilla adictiva
-2 mandarinas jugosas
-1 cáscara de limón chispeante
-2 cortezas de árbol vibrantes (cedro y sándalo) • 1 pizca de ambrox
Tiempo de preparación:
45 minutos de delicia
Receta:
-En primer lugar, poner a cocer a fuego muy lento un caviar de cítricos de mandarina jugosa y cáscara de limón.
-Añadir el licor de regaliz, en cantidad generosa, y cubrir de anís estrellado, ingrediente indispensable. Batir.
-Una vez que la emulsión haya «ligado», cuando los prime- ros efluvios de amor empiecen a embriagarnos, sumergir un palito de regaliz de sabor absoluto.
-Salpimentar con una lluvia de pétalos de Jazmín Sambac y mezclar suavemente para iluminar el regaliz con un halo luminoso. Poco a poco, dejar que obre el milagro…
-Vaporizar una nube de infusión de vainilla, la nota golosa que seduce a los paladares femeninos.
-Sin más demora, cocer a fuego vivo, añadiendo un puñado de cortezas de madera vibrantes y embriagadoras. Atención, esta etapa es indispensable para obtener un elixir moderno, ligeramente narcótico. Pero nada grave.
-En el transcurso de la ebullición, sazonar con una pizca de ambrox, una molécula de temperamento sensual, que reivindica una inclinación afrodisíaca. retirar del fuego.
-Verter en un frasco de cristal esculpido y servir tibio en la base del cuello.