La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, vivió los peores momentos de su vida dentro de un avión. Un error de cálculo provocó que su avión estuviese a punto de chocar con un avión de carga militar.
Michelle Obama, acompañada de la mujer del vicepresidente, Jill Biden, volvía de Nueva York, donde había tenido una intervención televisiva.
«Cosas como está ocurren con mucha frecuencia, pero desafortunadamente en este caso estaba implicado un avión presidencial», declaró un trabajador de la Administración Federal de Aviación al diario The Washington Post tras el suceso.
Según informaron, el problema aéreo se produjo por un error en el cálculo de distancia entre el Boeing 737, en el que viajaba Michelle Obama y Jill Biden, y el avión militar de 200 toneladas.
Al parecer los aviones no estaban tan cerca como el controlador creía, pero éste, por precaución, aviso al piloto del avión presidencial para que no aterrizase. «El controlador intentó muchas cosas antes de ordenar que diera vueltas. Realmente fue una mala técnica. No solo consiguió que se juntaran, sino que les dijo que estaban más alejados de lo que realmente estaban», dijo otro funcionario.