El tenista serbio Novak Djokovic ha conquistado este domingo el Abierto de Australia, primer torneo del Grand Slam del año, tras imponerse claramente en la final al británico Andy Murray por 6-4, 6-2 y 6-3, en un encuentro dominado de principio a fin por el número tres del mundo.
El balcánico y el escocés contaban con una oportunidad única en la Rod Laver Arena ante la ausencia de Rafa Nadal y Roger Federer, que acostumbran a monopolizar los partidos más importantes del año. El triunfo correspondió a Djokovic, que se mostró más sólido para sumar el segundo grande de su carrera, precisamente en el mismo sitio donde logró el primero hace tres años ante Jo-Wilfred Tsonga.
Por su parte al finalizar la fina, el serbio le dedicó el triunfo a su país por los «malos tiempos» que ha sufrido, en un discurso de agradecimiento tras recoger su trofeo en el que alabó a Andy Murray.
«Le dedico este título a mi familia, a mis hermanos, a mi novia Jelena, a la gente que ha estado apoyándome durante tantos años», señaló en medio de la Rod Laver Arena un emocionado Djokovic, que quiso reivindicar a su país.
«Hemos pasado malos tiempo para nuestra gente en Serbia. Todos los día intentamos presentar a nuestro país de la mejor manera posible, así que este trofeo también es para Serbia», apuntó el serbio, que tampoco olvidó en su discurso a las víctimas por las recientes inundaciones que han asolado Australia.
