Paul Newman, conocido por sus papeles en películas como «La gata sobre el tejado de zinc», «El buscavidas», «El golpe» y «Dos hombres y un destino», murió el viernes por la noche en su casa de Westport, Connecticut, a los 83 años y tras una larga lucha contra el cáncer. Su esposa desde hacía más de 50 años, Joanne Woodward, estuvo a su lado junto al resto de su familia.
Fue famoso además de su brillante actuación, por sus por los porches de carrera y por su gran cantidad de actividades filantrópicas que ejerció a través de su Fundación y sus campamentos Hole-In-The-Wall para niños enfermos.
Su gama de productos de alimentación Newman’s Own, fundada en 1982, dedicaba gran parte de sus beneficios a la beneficencia. A lo largo de los años, su fundación ha entregado unos 250 millones de dólares a asociaciones benéficas y otras organizaciones.
Newman patrocinó 11 campamentos infantiles en todo el mundo, que ayudaron a 135.000 niños a experimentar la diversión y los efectos beneficiosos de las actividades al aire libre.
Además de la filantropía, Newman participaba activamente en causas políticas liberales, y el ex presidente Bill Clinton y la senadora Hillary Clinton estuvieron entre los que ofrecieron sus condolencias.
«Paul era un icono americano, filántropo y campeón por los niños», dijeron los Clinton. «Nuestras oraciones y pensamientos están con Joanne y la familia Newman y las muchas personas en las que Paul influyó a través de su amabilidad y su generosidad inacabables».