Una noche musical deliciosa que ofreció una experiencia inversiva dentro de un fantástico bosque iluminado por gigantescas luminarias, impactó a los asistentes que se dieron cita en Namuh con motivo del Concierto del Parker Quartet en el marco del Festival de Cámara de San Miguel de Allende en su edición 2022.
Los organizadores lograron la fusión perfecta: La música del Parker Quartet, la belleza de las piezas y el interiorismo en Namuh, la delicia y delicadeza del platillo más Mexicano de todos, aderezado con vinos San Miguelenses y exquisito pan, resultaron perfectas para esta presentación sin precedentes del Festival de Cámara de San Miguel de Allende 2022, que, por vez primera, organizará un evento fuera de las sedes principales que son el Teatro Angela Peralta o Bellas Artes, y sin duda alguna, fue todo un acierto, el trabajo de Sharon, Cecilio Garza y todo el equipo de ambas partes resultó un sueño hecho realidad y despertó bravos y suspiros de los asistentes al entrar al recinto.
Las luces del recinto se atenuaron al tiempo que el escenario se bañó de una elegante luz donde los integrantes del Parker Quartet tomarían su luagar. Cuatro músicos entran, miran hacia el salón oscuro, se inclinaron respetuosamente, tomaron su lugar, enderezaron los atriles, abrieron partituras, afinaron cuerdas y comenzaron a tocar como primera melodía de Caroline Shaw (1982), Valencia. No soy una experta en música, por lo que Googlie a Caroline Shaw y su Valencia, que no sabía no se refería a la hermosa ciudad, sino a el tipo de naranja. Y sobre esta pieza que interpretará con perfección el Parker Quartet habla su autora: “Hay algo exquisito en la construcción de una naranja ordinaria. Cientos de vesículas de jugo increíblemente delicadas y de colores brillantes, listas para explotar. Es una cosa de la naturaleza tan simple, pero tan compleja y extraordinaria. En 2012, actué en el MoMA con el músico y artista perforare Glasser, una canción que habla sobre la simple belleza de la fruta, más adelante escribí “Valencia“, decidí canalizar el enfoque valiente e intuitivo de Glasser hacia la melodía y la textura, de modo que Valencia se convirtió en un abrazo sin ataduras de la arquitectura de la naranja común, a través de ondulantes armónicos y acordes de melodías algo viscosos. También es una especie de celebración de la conciencia de la comida natural y sin adornos que todavía está disponible para nosotros“, ¿no es una belleza? Ahora imaginen estas chispas y frescura en el medio de un bosque iluminado, #perfección.
El Director del Museo, Luis Eduardo Quezada, nos dice: “ Me he rodeado de activistas tanto locales, nacionales como internacionales quienes creen en la transformación social através de la música y la cultura“. Aquí la entrevista que me dió para todos ustedes.
Times» como «something extraordinary», dieron un concierto excepcional y una interpretación inspiradora y al tiempo conmovedora, hasta las lágrimas me salieron, al escuchar la belleza de la una de las piezas que interpretaron, rodeada de la belleza de ambientación creada por Namuh. Sharon y equipo !aplausos!
Como siempre, los empresarios locales apoyaron el evento: Casa Dragones con su tequila exquisito, Panio que ofrece siempre el mejor pan a la mesa, la Santísima Trinidad con su portafolio de vinos presentando un rico Rosé y Tequila Buen Viaje, con coctelería de primer nivel.
Ante tan magnífica noche sus Directivos nos platicaron sobre el inicio de este Festival que debe de tener mucha más resonancia a nivel nacional.
El Festival se celebra hace 40 años, siendo un evento muy apreciado por los conocedores a nivel global. Su Directora: “ Pero ¿cómo es que estamos aquí? ¿Cómo hemos llegado a sentarnos, todos los años en agosto durante los últimos 40 años, en las salas de conciertos en esta fabulosa ciudad en un pequeño pueblo de montaña mexicano para escuchar algo de la mejor música del mundo interpretada por algunos de los los mejores músicos del mundo? Instituciones culturales como los festivales de música de cámara no aparecen plenamente formadas en este ni en ningún otro escenario. Detrás de una velada como esta hay visión, compromiso, dedicación, trabajo duro, talento, dinero —mucho dinero— y generosas porciones de serendipia.
¿De quién era la visión? ¿Qué piezas debían encajar para hacer realidad esa visión? ¿Quién vio el panorama general en todas esas pequeñas piezas esparcidas como un rompecabezas sobre una mesa? ¿Cómo se alineó línea con línea, patrón con patrón, para unir esas piezas? ¿Y quién hizo todo ese trabajo duro? Todo inicio con James Henry “Tom Sawyer“, ejecutivo retirado del mundo de la radio y violinista amateur de Orlando, Florida, quién conoció a Leonard Brooks, reconocido pintor y violinista, quién en la Calle de Quebrada, realizaba sesiones musicales. Después de ir a un Festival de Música de Cámara en Inglaterra, se preguntaron ¿porque no hacerlo en San Miguel?
En 1962, el Instituto Nacional de Bellas Artes había establecido su primer puesto de avanzada más allá de la Ciudad de México en el ex-convento convertido de Las Monjas en San Miguel. Su director, Miguel Malo, médico local, docente y arqueólogo aficionado, había pedido a Leonard, quien llevaba varios años enseñando música los sábados a niños mexicanos en su casa, que trasladara sus clases a la floreciente escuela de arte y fuera director de su | su recién creado departamento de música. A principios de los años setenta, San Miguel podía presumir con razón de sus dos salas de conciertos, un calendario cultural durante todo el año que incluía conciertos sinfónicos, de cámara y recitales en los géneros clásico y barroco, conciertos de jazz y música popular, teatro dramático y producciones de teatro infantil, recitales de danza folclórica y moderna, así como su ya vibrante comunidad de pintura y escultura.
Durante la presentación inicial la Presidenta del Festival afirmó: “ Nuestra misión es traer música y educación musical de la más alta calidad a San Miguel de Allende y nuestra visión es hacer de San Miguel un destino musical de talla mundial.
La 44ava edición del Festival de Música de Cámara en San Miguel de Allende reúne grandes figuras como Magos Herrera, a quién tuve la oportunidad de conocer ayer. Compren sus boletos.
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