Tras una deliciosa temporada de fiestas en la que tal vez fuimos un poco indulgentes con nuestros antojos, buscamos nuevas ideas para cumplir uno de los propósitos más comunes para año nuevo: nutrir y cuidar nuestro cuerpo de la mejor manera posible. Ahora, como parte de nuestra rutina al hacer home office, es mucho más sencillo planear nuestras comidas por semana. Un buen tip es incluir algunos ingredientes europeos auténticos y de la más alta calidad para nutrirte y fortalecer tu sistema inmune. Y si no te sobra mucho tiempo, esta fórmula europea con los siguientes consejos te ayudará a preparar comidas rápidas y nutritivas.
La riqueza y diversidad de las tierras de cultivo de la Unión Europea, junto con las normas de seguridad en cada paso de la producción de alimentos y bebidas, dan lugar a una gran variedad de alimentos y bebidas saludables y nutritivos. No es ningún secreto que las dietas nórdicas y mediterráneas son dos de las más balanceadas del mundo. Pero, ¿qué tienen en común? Ambas se basan en una alimentación que incluye vegetales, granos enteros, proteínas y grasas.
Un plato tradicional
Todos consideramos a las frutas y verduras como parte importante de una dieta balanceada. Si las incluyes en tus comidas, sin duda deleitarás a tu paladar mientras nutres tu cuerpo con vitaminas, minerales y antioxidantes necesarios. Los vegetales de la UE son muy populares como guarnición de muchos platillos, como los espárragos, por ejemplo. En países como Alemania, Finlandia y Hungría, normalmente se sirven con salsa holandesa, la cual está hecha a base de yema de huevo, jugo de limón, mantequilla, sal y pimienta; también se disfrutan con crema agria o con una vinagreta dependiendo de la región.
Si lo que buscas son opciones orgánicas, muchos productos de la UE cuentan con el sello Orgánico, que garantiza un estricto apego a las normas de control de producción de alimentos. Asimismo, garantiza que no se usaron aditivos ni coadyuvantes y que los alimentos no tuvieron contacto con productos no orgánicos durante ningún paso del proceso.
Otro ingrediente que los europeos incluyen en su dieta son los cereales, y la manera más sencilla de consumirlos es con el pan. Por ejemplo, en Malta, los cereales son un ingrediente básico de la cocina, ya sea en platillos salados como la Ftiras o en bocadillos dulces como los Imgaret. El secreto es su calidad, sin embargo, es mucho más saludable elegir granos enteros como el centeno, la avena, la escanda o el arroz integral. Debido a su composición y menos procesamiento en su producción, estos cereales contienen altos contenidos de fibra, minerales, vitaminas, carbohidratos, aceites, proteínas y grasas. Actualmente podemos encontrar una gran variedad de cereales en productos auténticos de la UE como pastas, panes y variedades de arroz, los cuales pueden ser el ingrediente principal de deliciosos platillos que brindarán la energía necesaria para esos días llenos de trabajo.
Mantén buenos hábitos
Una comida saludable no está completa sin algo de proteína. Según la FAO, para mantener buenos hábitos alimenticios, las aves pueden ser una opción más saludable, puesto que contienen menos grasas saturadas que las carnes rojas y brindan ácidos poliinsaturados, que son buenos para reducir el colesterol y los triglicéridos[1]. Algunas buenas opciones para crear platillos exquisitos son pollo asado a la polaca o pato francés[2]. Gracias a los altos estándares de protección animal, puedes tener por seguro que la carne de aves de la UE está libre de cualquier contaminación gracias al sistema de rastreo que cubre todas las etapas de producción.
Si lo que buscas es una fuente de proteínas sustentable, también puedes elegir alguna opción libre de carne como frijoles de soya rumanos y habas lituanas, ambas legumbres son fuentes de nutrientes como ácido fólico, calcio, zinc, vitamina B y antioxidantes. Asimismo, las frutas y verduras europeas también están reguladas desde la granja, garantizando buenas prácticas agrícolas y métodos de producción certificados.
Otra buena fuente de proteína que los europeos consumen en su día a día son los productos lácteos. Como mexicanos, seguro podemos incluir yogur búlgaro o queso cottage belga, que son algunas de las opciones más populares para el desayuno. Los lácteos europeos son de los más reconocidos a nivel mundial por su calidad. La base de la industria láctea europea es la leche de calidad producida en las granjas de la UE, cuyo compromiso es garantizar que el ganado esté sano y bien alimentado. Otro factor que hace a estos productos auténticos es el método de producción, es decir, el conocimiento milenario para hacer queso que se transmite de generación en generación. Con esto en mente, no es ninguna sorpresa que al probarlos querrás incluirlos siempre en tus comidas.
El secreto de la dieta mediterránea
Para darle un toque especial a tus platillos, no olvides usar grasas saludables como el aceite de oliva, que contiene ácido oleico, un ácido graso mono insaturado que ayuda a reducir el riesgo de algunas enfermedades. Como sabrás la UE es el líder mundial de producción de aceite de oliva. El clima y geografía del continente brindan las condiciones ideales para el cultivo de aceitunas de la más alta calidad y el mejor sabor. Asimismo, la calidad de las aceitunas europeas está también ligada a las normas de trazabilidad, que garantizan el rastreo de cada lote de aceite de oliva hasta su lugar específico de producción. Lo mejor de este ingrediente es que puedes usarlo para cocinar o para preparar deliciosos aderezos caseros.
Ahora que sabes la fórmula para ser más saludable, descubre el sabor de los productos europeos por sí solos o como parte de tus platillos hechos en casa. Te compartimos la siguiente receta para preparar una rica ensalada griega con todo el sabor del mediterráneo.
Vas a necesitar medio pepino holandés en rebanadas, tomates cherry de España, pimiento morrón verde, ½ cebolla morada picada, ¾ de aceitunas Kalamata y un poco de queso feta griego. Para preparar el aderezo, combina un poco de vinagre de vino tinto alemán, jugo de limón, orégano seco, aceite de oliva de Portugal y sazona al gusto con sal y pimienta. Coloca todos los vegetales en un bowl. Luego, rocíalos con la vinagreta y revuelve. Desmorona el queso feta y listo. Esta exquisita ensalada es la guarnición perfecta para complementar cualquier platillo contu proteína favorita.
Como puedes ver, la cocina europea se distingue por incluir a los grupos alimenticios más importantes a través productos simples y de la más alta calidad. Detrás de cada productor europeo podrás descubrir una gran variedad de sabores y años de tradición. Inspírate con esta y otras recetas europeas auténticas que llevan consigo el secreto de un estilo de vida saludable.
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