Puebla es una ciudad increíble, hermosa, vibrante y justo la visitamos para asistir al gran evento que año con año organiza Andrés Romer, la Ciudad de Las Ideas. Un gran evento merece un gran lugar para hospedarse y así fue como llegamos al Azul Talavera, en el cual ya nos habíamos hospedado en otras ocasiones.
El hotel se encuentra en lo que era conocido como el barrio indígena de El Alto, que es la zona más antigua de la ciudad con el Templo de San Francisco justo frente a la entrada. Desde que se llega a Puebla las iglesias y hermosos edificios se presentan por doquier haciendo de la visita a esta ciudad una muy especial, y justo así es el Azul Talavera, majestuosa construcción que alberga dos mundos: El pasado con su hermosísima arquitectura Colonial y el presente con la arquitectura de líneas modernas y elegantes.
Al entrar al lobby una majestuosa estatua del escultor Gustavo Aceves, del cual soy admiradora total. El pintor y escultor mexicano radica en Italia, lugar al que llegó para crear uno de sus proyectos más ambiciosos a la vez que reflexivo: Lapidarium, caballos monumentales que, al igual que los históricos Caballos de San Marcos, han recorrido parte del mundo para llevar un mensaje en torno al fenómeno migratorio, trabajo por el cual fue galardonado en la XII Edición de la Bienal de Florencia, una verdadera belleza solamente para comenzar.
Las habitaciones con un estilo mexicano contemporáneo super elegante cuentan con todos los amenities y detalles para que los huéspedes tengan la mejor de las estancias. Un tema del que todos hablan son los espaciosos y hermosos baños con una tina deliciosa para descansar a cuerpo de reina. ¡Me fascina¡
Desde el Roof top del hotel se vislumba la bella ciudad de Puebla la cual tiene tantas sorpresas para sus visitantes. Ya sea para tomar una copa, para disfrutar del sol o simplemente sentarse a admirar el paisaje, el Roof Top del hotel es un hot spot que no te puedes perder.
Como es ya una tradición en Puebla, la gastronomía de los restaurantes en Azul Talavera es deliciosa, tanto para el desayuno como para la comida y cena, el Chef Ejecutivo presenta deliciosos platillos para todos los gustos, desde los tradicionales Chiles en Nogada en temporada como unos riquísimo chilaquiles para tomar fuerza para ir a recorrer esta increíble ciudad, la gastronomía es un regalo exquisito.
El hotel cuenta con lugares muy especiales y de muchísima historia como lo es el bar que se encuentra en el piso inferior en el cual existen los Lavaderos de Almoloya, un lugar interesantísimo el cual ha sido tomado por los arquitectos fusionándolo con los espacios del hotel.
He de destacar el espléndido servicio por parte de todos los que conforman la familia Azul Talavera dando un especial reconocimiento a su PR Vanessa García por todas las facilidades.