Rodolfo Bello, torero, fashionalité y empresario laza espectacular colección de sombreros, Fósforo Hats, de la mano de Hanson, una de las mejores casas de pieles del mundo.
Es interesante hacer una rápida historia del uso del sombrero a través de los años. Los primeros sombreros se comenzaron a usar en Egipto pero solo para trabajadores para cubrirse del sol, después el sombrero surge como una necesidad para protegerse del sol y la lluvia, En tiempos de Carlos VI de Francia comenzaron a usarse sombreros en el campo. En el de Carlos VIII se introdujo tan solo en tiempo de lluvia. En el reinado de Luis XI ya se habían generalizado más y se llevaban en todo tiempo extendiéndose su uso a las naciones vecinas. Consta que Carlos IV de Francia llevaba sombrero de castor al hacer su entrada en Ruan en 1494. Este sombrero estaba forrado de terciopelo carmesí y llevaba en el remate una borla de hilo de oro. Cuando la moda del sombrero estalló se comenzaron a usar guarnecidos de plumas, cordones. Más adelante, el uso del sombrero fue generalizándose variando la forma según la época. A principios del siglo XX se usaba comúnmente en todo el mundo civilizado.
Durante una animada charla con Rodolfo hablamos sobre lo que implica realizar una colaboración con una marca tan prestigiada y sobre todo como nace la idea para hacerlo: “Los sombreros siempre me han gustado, el tiempo que paso en el rancho, montando, etcétera es tiempo de usar sombreros, por lo que desde muy chico los usaba y me encantan. Ahora cada vez que veo uno casi son perfectos pero siempre falta ese toque de personalización que tenían los de antaño en el viejo oeste. Cada sombrero de mi colección, Fósforo Hats, es intervenida por mí con plumas, cintas, piel y hasta intervenciones con pincel y color, haciendo de cada sombrero un accesorio único e irrepetible“.
“ Es todo un honor trabajar con una marca tan prestigiada como Hanson. Una firma de lujo con tradición, que siempre esta a la vanguardia, reconocida como empresa líder nacional e internacionalmente en el ramo de la peletería, por sus diseños, calidad y excelencia en el trabajo. En cada una se sus sucursales tienen la tradición de mantener un taller en la parte alta de la tienda donde paso a paso, de la mano de un equipo de expertos artesanos que lleva generaciones trabajando la piel, se da vida a cada pieza que se exhibirá en la boutique, la idea de la prenda que se quiere elaborar, se aterriza en un boceto, posteriormente en un patrón y termina en una manta o prototipo“.
Al hablar sobre materiales de su colección Rodolfo nos platica: “ La colección que presento es la primera y me siento muy orgulloso de ella, en cada sombrero he puesto todo mi empeño y cariño por los que los compren se van a llevar una pieza hecha con todo el profesionalismo y cariño. Cada pieza es artesanal elaborada de fieltro de conejo como se hacían antiguamente y con un toque especial que les doy que hace que el sombrero se vea vintage, una mezcla de varios productos que es justamente el diferenciador de mi marca. La idea de este lanzamiento es urbanizar el sombrero, que sea un accesorio que se use los 365 días del año y en todo momento, desde una boda, comida, inclusive yo lo uso cuando voy en mi patineta, es un accesorio moderno, elegante y cool, depende con que lo uses.
Aquí les presento una galería para que vean que divinos sombreros los cuales son solo el principio de este proyecto el cual nos platica …
