Considerado uno de los destinos turísticos más exclusivos del mundo, Mónaco es una ciudad-estado de pequeñas dimensiones, ubicado en las orillas de la Costa Azul, en las costas del Mediterráneo.
Llegar a turistear por sus callecitas es una oferta que no puede rechazarse, además de recorrer el puerto, donde nos encontraremos con algunos de los yates más caros del planeta, y que se ubica en el distrito de La Condamine.
Hacia el sur se ubica Villa Mónaco, conocido como «La Roca», una especie de península de piedra que se interna en el mar y donde se encuentra el Palacio de Grimaldi, sede de la familia regente y que se puede visitar, aunque habrá que subir un buen tramo de escaleras. Pero el esfuerzo lo vale, ya que ofrece vistas increíbles.
Aquí algunos otros sitios que no puedes dejar de visitar en Mónaco:
Montecarlo. Ubicado al norte de La Condamine, es famoso por dar nombre a pruebas de motor como el Rally de Montecarlo o el Gran Premio de Mónaco. Además cuenta con el Casino de Montecarlo, uno de los más elegantes y renombrados del mundo.
Jardín Exótico de Mónaco. Fue creado por el Príncipe Alberto en el barrio de Les Révoires.
Museo Oceanográfico. Ubicado en un edificio que data de 1950, está construido directamente sobre el mar, en un acantilado que se alza 85 metros por encima de las aguas. Dirigido durante años por el célebre investigador Jacques Costeau, cuenta con colecciones de maquetas, barcos, útiles de pesca y de navegación, además de esqueletos de ballenas y otros animales y un acuario.
Circuito Urbano de Fórmula 1. El Gran Premio de Mónaco, que se disputa desde el año 1950, es uno de los más peligrosos del circuito mundial.
Catedral. Construido en el siglo XIX, alberga diferentes colecciones de obras de arte, además de una de coches que pertenecieron al príncipe Rainiero de Mónaco.
Otros sitios para conocer son la Casa de la Ópera de Mónaco, el Estadio de Futbol Louis II y el Mercado Condamine, donde venden objetos de artesanía.