Si te gusta el cine y eres un apasionado de vivir experiencias al estilo Hollywood, esta es tu oportunidad. La mansión donde se filmaron algunas de las escenas más famosas de Scarface, dirigida por Brian de Palma en 1983, y protagonizada por Al Pacino y Michelle Pfeiffer, se encuentra en renta. Aquí era donde residía Tony Montana, un inmigrante cubano que, en busca del sueño americano, se convertiría en el principal narcotraficante de Florida de la mano de un Al Pacino en uno de sus mejores papeles. Pero, la realidad, es que la verdadera residencia que sirvió de telón de fondo para la película se encuentra ubicada en Santa Barbara, California.
La residencia, conocida como Little Paradise o El Fureidis, mantiene intactos sus jardines, su fastuosa entrada y su fuente blanca, tan reconocida en la película. Esta obra es del arquitecto estadounidense Bertram Goodhue, distinguido por su estilo neoclásico, que fuera construida a principios del siglo pasado inspirándose en las villas romanas clásicas. En aquellos tiempos, su primer dueño fue un noble de apellido Gillespie; que desde aquel entonces, ha ido pasando continuamente por diferentes inquilinos y propietarios millonarios.
En su interior, más de 900 metros cuadrados se distribuyen en cuatro dormitorios, seis baños, una cocina y varios salones y salas de estar. Pero quizás lo más impresionante sean sus exteriores. Más de 40.000 metros cuadrados en los que hay espacio para piscinas en cascada, lujosos jardines que albergan una de las mejores colecciones de palmeras del mundo, spas y una casa para invitados. Tanta exuberancia, junto a una localización privilegiada con vistas espectaculares al océano Pacífico, no es apta para todos los bolsillos. Ahora, a través de Village Properties, la casa está en alquiler por 30.000 dólares al mes. No se anima?
Más info: www.villagesite.com