El cantante Sting y su esposa, Trudie Styler, conocidos en su vida por su gran intensidad sexual, en una ocasión no pudieron resistirse a dar rienda suelta a su pasión y terminaron manteniendo relaciones sexuales en los lavabos del club neoyorkino ‘The Top of The Standard’.
De esta forma, el artista confesó: «Una vez lo hicimos aquí. Simplemente estuvimos inspeccionando los lavabos».
Es que la pareja nunca ha tenido reparos en hablar de su vida sexual, hasta el punto de hacer públicas algunas de sus prácticas habituales en el dormitorio. La estrella del rock reveló recientemente que les gusta «disfrazarse» para calentar el ambiente.
«Somos muy juguetones, y a mí me gustan mucho las fantasías sexuales. Me gusta verme bien, vestirme para ella y que ella se vista para mí. Cuando nos miramos, solo hay romance. No creo que el sexo en público sea muy interesante», declaró.