Johnny Depp, una de las celebridades más «rockeras» del espectáculo asistió a un concierto de Iggy Pop en el Hollywood Palladium de Los Ángeles junto con sus guardaespaldas que violentaron a un hombre: lo tiraron al suelo después de bailar demasiado cerca de la zona VIP en la que se encontraba el actor.
Un hombre llamado Robyn Ecker, de 52 años, quien fue trasladado al hospital, luego le hizo una demanda al actor. Ahora, los oficiales están intentando ponerse en contacto con Depp y sus guardaespaldas para interrogarlos.
Según la información publicada en TMZ, el asistente de Ecker confirmó que ella y su marido habían estado bebiendo durante la tarde, mientras que una fuente legal afirmaba que estaba borracha en el momento de poner la denuncia.
Al parecer, el hombre habría pagado 600 dólares por asistir al concierto y al estar cerca de una celebridad, sufrió un acto violento por una situación injusta.