Contar con una celebrity para que promocione tus joyas tiene sus ventajas, pero, según con quién se cuente, tiene muchos inconvenientes. No es la primera vez que la prensa del corazón se hace eco de la distracción de unas joyas; en este caso la implicada no es otra que la famosa heredera del imperio Hilton.
La historia se remonta a 2007, cuando la firma de joyería Damiani le prestó a Paris Hilton unas joyas valoradas en 60.000 dólares para que las luciese en sus apariciones públicas, según informa Contactmusic.
El contrato de préstamo incluía, por supuesto, el hecho de que la celebrity se encargaría de devolverlas sanas y salvas, pero también que se ocuparía de tenerlas guardadas en un lugar seguro cuando no las llevara puestas.
Solo un año después, en diciembre de 2009, un ladrón se coló en casa de Paris Hilton y sustrajo diferentes objetos, entre ellos las citadas joyas de Damiani. El coste total de lo robado era de nada menos que 2,8 millones de dólares.
Sin embargo, el año pasado la Policía recuperó todas las joyas que Damiani le había otorgado a Paris, lo cual no implicó que Paris Hilton las devolviera a la firma, tal y como indica la demanda presentada por la firma de seguros alemana Allianz.
No solo eso, sino que además, la firma de seguros acusa a Paris Hilton de no haber cumplido la parte del acuerdo que se refería a la protección de las joyas prestadas, acusándola de haber dejado la puerta de entrada abierta y las alarmas desconectadas.
La demanda destaca además que el sistema de alarma no estaba activado y que el ladrón que se coló en casa de Paris Hilton se encontró las joyas de Daimani en el armario «a la vista de cualquiera.»