La revista Vanity Fair ha publicado estos días unas imágenes muy llamativas. La editorial ha conseguido entrar en el interior de un garaje privado del diseñador Ralph Lauren. Más que un garaje, las imágenes nos muestran una especie de moderno museo del motor en el que se pueden encontrar piezas únicas del coleccionista. Lauren decidió comprar las instalaciones de un antiguo concesionario de coches que había cerca de su casa.
Le realizó una rápida e intensa reforma y decidió guardar en su interior algunos de los coches más valiosos del mundo. El museo-garaje se encuentra cerca de su lujosa casa de Westchester en Nueva York. La sala impacta por su minimalismo y los modelos que se presentan nada más entrar.
La primera colección que se puede ver es la de los Ferrari, entre los que destaca un modelo Testa Rossa de 1958. La colección muestra un total de 60 alucinante vehículos, dispuestos como si se tratase de una galería de arte de alta calidad. Eso sí, recordar que los coches están completamente preparados para darse una vuelta si así quiere el diseñador.
La colección incluye un 1936 Bugatti Type 57SC Atlantic valorado en 40 millones de dólares y es considerado el coche más caro del mundo, entre otros vehículos de prestigiosas marcas como Mercedes-Benz, Alfa Romeo, Bentley o Lamborghini.