Se facilitan las cosas en el mundo de los videojuegos: ahora se impone la tendencia a jugar con pocos o ningún mando, a interactuar con una consola armada de sensores. Según publica hoy el diario El País, las compañías líderes en el mundo de los videojuegos se sumergen en una guerra para implantar sus artilugios en el mercado. A falta de una nueva generación de videoconsolas, Microsoft y Sony lanzan una nueva generación de periféricos. Objetivo: derrotar a la Wii de Nintendo.
En 2006, Nintendo decidió dejar a sus rivales la batalla por ver quién ideaba la consola más potente y se desmarcó con la Wii: jugar saltando, fingiendo que el mando es una raqueta o dando puñetazos al aire que en la pantalla se convierten en ganchos de boxeo. Se han vendido 71 millones de copias, en torno al doble de las cifras que manejan Microsoft con su Xbox 360 y Sony con la PlayStation 3, ambas consolas con teclas que pulsar, al viejo estilo.
Tras la revolución, llegan las reacciones. Sony presentó un nuevo mando para su consola : Move. Parece un micrófono de karaoke: un cono plástico con botones que termina en una bola luminiscente. No solo captura movimientos, sino que se coordina con una cámara que también detecta voz. Así, el aparente micro se convierte en espada o bate de béisbol según el juego. Como la Wii pero registrando la posición del jugador en la habitación (más cerca o más lejos de la pantalla) y trasladando los datos al mundo del juego.
Microsoft no se queda atrás y redobla la apuesta: directamente nada de mandos . Kinect es un dispositivo para la Xbox 360 que cuenta con micro, cámara y sensores 3D de movimiento. No hay que tocar ningún botón, solo moverse y hablar. El reconocimiento de voz permitirá, por ejemplo, parar y reanudar una película al gritar «stop» o «play». La intención es convertirlo en el ansiado dispositivo para todo: juegos, películas, televisión, teléfono e Internet.
Kinect estará disponible para el mercado estadounidense a partir del 4 de noviembre, a 150 dólares. El precio del sistema completo, junto a la consola Xbox 360, asciende a 300 dólares, unos 100 dólares más que la Wii.
Analiza el periodista Miguel Calzada: “Al final, lo que decidirá el combate será la calidad de los juegos disponibles para cada artilugio. Inundarán las tiendas en navidades y tanto en Microsoft como en Sony se frotan las manos. Sin embargo, Nintendo promete contraatacar en 2011: anunció una consola portátil para jugar en 3D sin anteojos adicionales .” Será cuestión de esperar…