Para este 10 de mayo, Idole de Armani tiene una opulenta fragancia floral, con un empaque muy delicado.
La mujer IDOLE brilla con una sensualidad magnética y una gracia natural. Ella es exquisita, cautivadora. Sexy y sensual, es expresiva y revela la fuerza de su carácter. Es libre para ser ella misma.
La salida es deslumbrante con naranja amarga, jugosa pera, jengibre y notas de artemisa.
El corazón, brillante y audaz, posee rosa Loukoum el emblema de IDOLE d’ARMANI, mítico jazmín con un reflejo de amanecer, mezclado atrevidamente con azafrán.
Rara y delicadamente cubierto de cuero, tiñendo este deleite floral con una sutil y picante nota color miel.
En la base, luminosa y sensual, inesperada peonía, pachulí y vetiver, refinados y progresivos, añaden su propia armonía al corazón de azafrán de las flores. Uniendo fuerzas con la mujer que la porta, nunca marcando, ni disimulando su carácter se funden en la piel de aquella que ha sucumbido a su encanto.
Para capturar su sello en esta fragancia femenina, Giorgio Armani, inspirado en los años treinta, crea una esfera de vidrio cristalino hermosamente rodeada por halos de ondas circulares en sus lados que susurran la “O” central de IDOLE. En el frente del frasco se deletrea majestuosamente IDOLE d’ARMANI y coronándolo, una pieza dorada de joyería lo adorna bella y elegantemente.
El empaque exterior representa un bloque de oro puro, pulido y esculpido finamente, cubierto por surcos que forman un estuche precioso y sofisticado, grabado con la firma IDOLE d’ARMANI.
