El Muro de Berlín fue, durante varias décadas, símbolo de intolerancia y separación, aunque luego de su caída se transformó en un ícono de la lucha pacífica por la libertad.
Para celebrar un nuevo aniversario del derrumbe del denominado Telón de Acero, la casa relojera Romain Jerome se suma a los homenajes lanzando el Berlin-DNA.
Este guardatiempo limitado a 25 ejemplares reinterpreta la euforia que reinaba durante la reunificación de Alemania, creando una auténtica obra de arte para la muñeca.
La creación fue realizada en colaboración con la East Side Gallery, y ha permitido a Romain Jerome recoger fragmentos del Muro que han sido incorporados en la esfera del reloj, creando así una pieza única que guarda parte de la historia contemporánea.
El reloj Berlin-DNA está contenido en una caja de acero de 46 mm con un bisel de cerámica negra y una correa de piel de cocodrilo Hornback de color negro.
El diseño de la esfera gris se inspira en la caída del Muro, que tuvo lugar cuando ya la noche había caído sobre la ciudad, mostrando una sección de Berlín que perfila las calles y edificios tridimensionales resaltando en color rojo el recorrido del Muro con un acabado de Superluminova verde y una línea azul que evoca el río Spree.
El fondo de la caja muestra el «Bruderkuss» o «Beso Fraterno», mural del artista ruso Dmitri Vrubel y uno de los más famosos que adornan la East Side Gallery.
