La tendencia de Michelle Obama se inclina hacia los diseñadores latinos y aquellos nombres que no son tan comerciales.
La llegada a la Casa Blanca de la Primera Dama Michelle Obama marca una nueva etapa en la industria de la moda, ya que la tendencia apunta hacia los diseñadores con menos reconocimiento mundial.
Michelle Obama ha descartado usar trajes de las casas de moda más reconocidas, como Chanel, Oscar de la Renta, Carolina Herrera o Marc Jabos.
Más bien la Primera Dama se inclina por diseñadores con menos renombre pero que poco a poco han tratado de ganarse un espacio en la industria.
Hasta el momento han sido tres diseñadores hispanos y un oriental quienes han tenido el honor de vestir a Michelle Obama en importantes eventos.
Nombres como Isabel Toledo, Narciso Rodríguez y María Cornejo ya se hacen notar en el mundo de la moda. La cubana Toledo fue quien visitó a Obama en la ceremonia de asunción del Presidente Barack Obama.
Los diseños de Narciso Rodríguez, también de origen cubano, han vestido a la Primera Dama durante la campaña presidencial de Obama. De hecho uno de sus vestidos fue usado por Michelle Obama en la noche de la victoria electoral.
Mientras que la chilena María Cornejo ha tenido la oportunidad de vestirla en varios eventos públicos, uno de ellos fue cuando Obama apareció con uno de sus trajes en el programa The Daily Show de John Stewart.
Finalmente el taiwanés Jason Wu fue quien tuvo el gran honor de que Michelle Obama escogiera su vestido para el evento inaugural de la toma de posesión.
Tal vez las elecciones de Michelle Obama van más allá de vestir bien e impresionar al mundo de la moda, seguramente lo que quiere es apoyar la diversidad étnica y sin duda estas acciones son un legado que dejará en la sociedad.