Cadillac tiene una gran historia transportando presidentes desde el siglo pasado, en especial Jhon F Kennedy. Pero esta ocasión la empresa General Motors fue comisionada para construir una nueva limusina para el presidente Barak Obama. Y por lo que se sabe, han sido varios meses de trabajo para conseguir un coche que supera al anterior en prestaciones y medidas de seguridad.
El nuevo modelo está reforzado con una carrocería de acero, aluminio, titanio y algunos componentes de cerámica que frenarían cualquier tipo de proyectil que intentase atravesarla. Hasta ahora son los únicos datos que se tienen del Cadillac que transporta al nuevo presidente de Estados Unidos por obvias razones de seguridad.