El presidente francés Nicolas Sarkozy le otorgó el título honorario de «dama» a la escritora británica, quien aprovechó su discurso de aceptación para disculparse por haberle dado un nombre francés a uno de los villanos de su famosa serie sobre el niño mago Harry Potter.
Uno de sus bisabuelos, que era francés, la recibió en 1924 por su valentía en la Batalla de Verdún durante la Primera Guerra Mundial, dijo.
También le agradeció a sus lectores en Francia «por no haberme guardado rencor por haberle dado un nombre francés a mi personaje malvado» de Lord Voldemort.
La escritora saltó a la fama en 1997 con la publicación de «Harry Potter y la piedra filosofal«, la primera de sus siete superexitosas novelas cuyos libros han vendido más de 400 millones de ejemplares y han sido traducidos a 67 idiomas.