Un nuevo segmento de viajeros de lujo se vislumbra a nivel mundial, llamados “Los Interhousers” según un estudio de De la Riva Group. Hombres y mujeres con altos niveles adquisitivos que simplemente prefieren experiencias libres que los hagan sentirse como en casa.
Los hábitos de consumo están cambiando continuamente en el ámbito del lujo, pero los viajes son una parte crucial de estos. En México los consumidores de viajes de nivel A/B están transformando su forma de viajar dando carta abierta a las “lujo-experiencias” que al “lujo-comodidad” afirma estudio de De la Riva Group.
En un completo documento publicado es su página web De la Riva Group describe este nuevo sector que está dispuesto a intercambiar su casa con tal de sentirse libre de vivir su propia experiencia.
“Los Interhousers” son hombres y mujeres mexicanos de nivel socio-económico alto que intercambian casas para vivir como locales en otro país” describe el estudio.
¿Te atreverías a dejarle tu casa a un extraño?
Sí! todos los nuevos Interhousers, están dispuestos a dejarle su casa a un extraño, ya que ambas partes se jla juegan. Sin embargo el miedo y la desconfianza no limita que se animen vivir la experiencia.
<a href=»https://www.flickr.com/photos/124966429@N07/15363972507″ title=»White-Cozy-Family-House-Interior-Design-6 by Fernanda Pérez, on Flickr»><img src=»https://farm6.staticflickr.com/5616/15363972507_d8e443360b.jpg» width=»500″ height=»375″ alt=»White-Cozy-Family-House-Interior-Design-6″></a>
Según el estudio 72% de los mexicanos con altos niveles socio-económicos están dispuestos a hacerlo, mientras que el 67% de noveles bajos dijo que no.
“En una sociedad colectiva, la reputación y la confianza son las llaves que abren las puertas a nuevos contactos para formar una comunidad” agrega el estudio.
La colaboración de estas comunidades abre puertas tan simples como el que puedas usar la bici de la casa que intercambias y puedas recorrer la ciudad en ella. Sin duda no es una cuestión de dinero, ya que este segmento puede y tiene los fondos para alquilar un cuarto de hotel de lujo, sin embargo prefiere vivir una experiencia local.
La gran mayoría de los amantes de este tipo de experiencias destacan que los usuarios dejan indicaciones para que los “huéspedes” vayan a lugares menos turísticos y más locales: restaurantes o lugares imperdibles.
“Los Interhousers no podrían solos, la familia con quien intercambian se encarga de integrarlos a la localidad: le comparte sus lugares favoritos para comer, los platillo que no pueden dejar de probar, las mejores rutas para transitar y los sitios que no vienen en las guías turísticas, pero son imprescindibles de explorar” apunta el estudio.