Esta mañana asistimos a un recorrido exclusivo en el Museo Tamayo con motivo de la inauguración de dos nuevas exposiciones.
Al evento asistió Andrea Torreblanca y Juan Carlos Pereda, curadores del Museo Tamayo, así como algunos artistas participantes.
El recorrido inició con la presentación de El teatro del mundo, muestra colectiva que reúne 25 obras de 21 artistas nacionales e internacionales interesados en la arquitectura como lugar de representación política y social. El título alude a una metáfora utilizada desde la antigüedad, que se refiere a la noción del mundo como escenario, en la cual cada individuo de la sociedad tiene un guión designado para interpretar.
La curadora Andrea Torreblanca tomó como referencia un hecho histórico de 1787 para concebir la muestra: cuando el duque Grigory Potemkin mandó edificar fachadas falsas para la reina Catalina II de Rusia, en Crimea, con la intención de disfrazar la región bajo una supuesta prosperidad y desarrollo. Por lo tanto, las “villas Potemkin” son una alegoría de la arquitectura como propaganda política: cuando una nación disimula una imagen de aparente progreso a partir de sus monumentos, fachadas y supuestos proyectos masivos de vivienda social.
Los artistas en la exposición, que será inaugurada mañana 12 de junio, parten de distintas relaciones históricas que abarcan, desde la idea de representación nacional a través de los pabellones en las ferias mundiales de los siglos XIX y XX, y sus connotaciones nacionalistas y coloniales, hasta proyectos utópicos de regeneración urbana y social que reconfiguran la ciudad y sus comunidades.
Los artistas participantes son: Alexander Apóstol (Venezuela), Yto Barrada (Francia), Marcelo Cidade (Brasil), Nathan Coley (Escocia), Livia Corona (México), José Dávila (México), Marjolijn Dijkman (Países Bajos), Gardar Eide Einarsson (Dinamarca), Ángela Ferreira (Mozambique), Andreas Fogarasi (Austria), Meschac Gaba (Benín), Carlos Garaicoa (Cuba), Terence Gower (Canadá), Pedro Reyes (México), Pablo Hare (Perú), Heidrun Holzfeind (Austria), Christoph Draeger (Suiza), David Maljkovic (Croacia), Olivia Plender (Inglaterra), Anri Sala (Albania) y Kostis Velonis (Grecia).
La segunda exposición presentada fue Antígona. Exposición documental / Rufino Tamayo, resultado de una investigación en el archivo privado de Olga Tamayo.
La muestra, con la curaduría de Juan Carlos Pereda, exhibe 14 goauches originales realizados por el pintor oaxaqueño para la escenografía y diseño de vestuario del balletAntígona, el cual se presentó en el Covent Garden de Londres. Las piezas se exhiben por primera vez desde el montaje de ese espectáculo en 1959.
Durante su residencia en París, Rufino Tamayo recibió una invitación para colaborar con el Royal Opera House de Londres, en la puesta dancística de Antígona, obra basada en el mito de Edipo. Junto con el coreógrafo sudafricano John Cranko y el músico griego Mikis Theodorakis, Tamayo colaboró con un grupo de creadores que buscaban modernizar el ballet clásico. Si bien esta adaptación incomodó al público ortodoxo, la crítica la calificó como una de las primeras manifestaciones para renovar el ballet en Europa. La obra dancística tuvo un total de 23 representaciones de 1959 a 1966.
La participación de Rufino Tamayo en el diseño de vestuario hace hincapié en la versatilidad de su trayectoria artística, la cual no sólo estaba limitada a la obra en caballete o mural, sino extendida a otros ámbitos creativos.
La muestra es resultado de la investigación en el archivo que Olga Tamayo conformó durante más de 60 años sobre la actividad de su esposo. Antígona. Exposición documental / Rufino Tamayo incluye notas de prensa, fotografías, documentos, dibujos, cartas, telegramas y los goauches, todos pertenecientes a dicho acervo, del cual se han integrado fondos iconográficos de la obra del pintor, así como bibliografía y hemerografía. De esta forma, el Museo Tamayo preserva y difunde no sólo la obra pictórica de su fundador Rufino Tamayo, sino su actividad cultural como ícono universal del arte.
Esta exposición se inaugurará mañana 12 de junio y permanecerá en el museo hasta septiembre de 2014.