Christian Dior es sinónimo de elegancia, de lujo, y también de espíritu emprendedor, siendo el primero en crear un perfume al mismo tiempo que una colección de moda.
Ese espíritu visionario de Christian Dior es reflejada y homenajeada por París en una exposición que descrubre su pasado como galerista, con quince obras inspiradas en la fragancia “Miss Dior”.
El mítico perfume sirve como inspiración para las 15 obras de arte que reúne la exposición del Grand Palais, que se podrá visitar gratuitamente hasta el 25 de noviembre y que viajará luego a Estados Unidos y China.
Las quince artistas son mujeres porque el perfume fue un homenaje de Dior a su hermana Catherine, quien durante la II Guerra Mundial se unió a la resistencia y fue deportada al campo de concentración de Ravensbrück (Alemania), de donde pudo salir en 1945, señaló Mikaeloff.
Y a todas ellas, según el comisario, se les dio “carta blanca” en el proceso de creación, indica el portal Terra.
El lazo que decora el frasco de la fragancia y las rosas que caracterizan su olor y que suponen un guiño a la infancia del diseñador en su casa de la Normandía son algunos de los motivos que evocan las obras expuestas.
La artista visual portuguesa Joana de Vasconcelos, por ejemplo, ha recreado un gran lazo con la ayuda de cientos de frascos iluminados con LED, mientras que la brasileña Maria Nepomuceno ha creado frascos de perfume con arcilla, de los cuales surgen raíces y tentáculos, evocando a la naturaleza.
Las rosas han inspirado, en cambio, el trabajo de la japonesa Tomoko Shioyasu, que ha reproducido el movimiento de esta flor soldando enormes láminas de papel, y el de la estadounidense Alyson Shotz, que ha esculpido una rosa que cambia de color según la luz y la posición del espectador.
El recorrido permite observar creaciones contemporáneas, realizadas especialmente para esta muestra, la que se intercalan con vestidos inspirados también por ese perfume y diseñados por Christian Dior y por su actual sucesor, Raf Simons.
Además, una zona de la exposición recuerda su pasado como galerista con algunas de las obras que expuso en esa época, de Bernard Buffet a Marc Chagall.
El genio creativo de Dior no solo revolucionó la alta costura con su primer desfile propio, bautizado “New Look” y que rompió en 1947 con la estética austera de la postguerra gracias a cinturas ceñidas y voluminosas faldas con forma de corola, sino que también sorprendió con su visión empresarial.
El lanzamiento en paralelo de su propia fragancia, “Miss Dior”, que encargó a Paul Vacher, concebía por primera vez “el perfume y la moda como un conjunto”, explicó el comisario de la muestra, Hervé Mikaeloff.
