Cobá se traduce al español como “agua agitada por el viento”. Entre el año 400 y el 1100 de nuestra era, ésta fue una de las ciudades más grandes del período clásico maya, llegando a albergar unos 50 mil habitantes. Una de las razones principales por la que fue asentada aquí fueron dos pequeños lagos que abastecían de agua a la población. En automóvil, esta ciudad se encuentra sólo media hora al oeste de Tulum.
La ciudad está compuesta de varias comunidades mayas: Cobá, Chumuc Mul, Nohoch Mul, Las Pinturas, Macanxoc y Kukulcán, entre otras. Desde Nohoch Mul, la pirámide más alta del norte de la península con 42 metros de altura, la vista de la selva que se extiende hasta el infinito es incomparable.
Cobá también te permite caminar bajo la sombra de las copas de los árboles, envuelto en los sonidos y el color verde de la selva. Aquí no tardarás en hallar exóticas aves y, con un poco de suerte, monos aulladores, según información del sitio visitmexico.com.
Adéntrate en la selva y conoce una comunidad maya donde podrás disfrutar de sus incomparables bellezas naturales, cenotes, lagunas, senderos en la selva, y áreas naturales protegidas, santuarios de flora y fauna local.
Atrévete a surcar los cielos en emocionantes tirolesas y desciende a las profundidades en rappel. Nada en los cenotes de agua cristalina y deléitate con un abundante almuerzo de comida típica regional preparada al momento.
Su importancia histórica y la belleza de su entorno natural hacen de Coba una visita obligada.