El ritual se repite cada año en Halloween: niños tocando a nuestras puertas con botes de plástico en forma de calabaza, pidiendo dulces al grito de «dulce o truco», «dulce o travesura», «¿truco o trato?» o «¿me da mi calaverita?».
La celebración se transforma así en un aquellare de dulces para los más pequeños, algo que ha preocupado mucho a la doctora Jennifer Shu, colaboradora de CNN Health, habida cuenta los peligros de obesidad infantil.
Es por ello que la médico ha sugerido ofrecer a los niños dulces sanos, utilizando algunos trucos:
1- Si la idea es ofrecerles chocolates, elegir el oscuro en lugar del que contiene mayor porcentaje de leche. Los primeros son más altos en antioxidantes, por lo que son más saludables.
2- La doctora Shu recomendó, además, elegir dulces de un tamaño más pequeño, del tamaño «muestra» en lugar del «normal», para asegurarse que los niños no coman demás.
3- Si, por el contrario, optamos por las frutas, evitar aquellas masticables o pegajosas, que suelen quedarse adheridas a los dientes de los pequeños, aumentando el riesgo de producir caries. «No es la cantidad de azúcar sino el tiempo que se queda en tu boca», dice. ¿La mejor opción?: Chicle sin azúcar.
4- Otra opción es regalar antojos en lugar de dulces. Nueces, que tienen un menor número de calorías y contienen una buena cantidad de «grasas saludables», o palomitas son algunas de las variantes.
5- Regalar juguetes es otra variación. La doctora Shu cuenta que suele regalarles calcomanías, tarjetas de Pokemón y otras cositas.
6- En el caso de las clásicas paletas, escoger aquellas que no tienen un centro pegajoso, previniendo así que los pedazos se atoren en los dientes de los niños.