Starwood Hotels & Resorts Worldwide, Inc. anunció que el icónico Palacio del Inka de Cusco se incorpora a la cartera de la marca The Luxury Collection después de una amplia renovación de US$15 millones.
Palacio del Inka, A Luxury Collection Hotel en Cusco propiedad de Libertador Hotels, Resorts & Spas ha sido remodelado para una nueva generación de viajeros de lujo, y ofrece un servicio discreto y personalizado en la capital histórica de los Inca en Perú. Con esta inauguración, Starwood expande su presencia en Perú, donde opera actualmente 6 hoteles y resorts, entre ellos, 3 bajo la marca The Luxury Collection.
“América Latina tiene un vasto paisaje con destinos inigualables que resultan ideales para los exploradores globales que buscan experiencias únicas con servicio y estilo excepcional. Como resultado, la cartera de la marca The Luxury Collection sigue creciendo en la región, donde ahora tenemos 11 hoteles, desde la Argentina hasta México”, dice Osvaldo Librizzi, copresidente de Starwood Hotels & Resorts para las Américas. “Es un honor para nosotros dar la bienvenida a Palacio del Inka, que representa siglos de historia, riqueza y encanto nativo, a nuestra cartera de The Luxury Collection. Estamos seguros de que se convertirá en un favorito de la nueva generación de viajeros de lujo que visiten la región en el futuro”.
La historia
El histórico Palacio del Inka, está situado en el corazón del Cusco, está ubicado justo enfrente de las ruinas preservadas del Qoricancha o Templo del Sol.
Con una impactante fachada colonial española, Palacio del Inka fue originalmente parte de la civilización incaica a comienzos del siglo XV, y fue luego destinado a conquistadores españoles y habitado por ellos en el siglo XVI.
El proyecto
El hotel es un verdadero reflejo de la cultura, la arquitectura y el diseño diversos y vibrantes del Cusco. El amplio proyecto de dos años fue dirigido por Caparra Entelman & Asociados, la firma de arquitectura y diseño de interiores latinoamericana, en colaboración con artesanos y trabajadores locales y la comunidad.
“Durante años Palacio del Inka ha sido un hotel icónico en la ciudad de Cusco”, dice Jorge Melero, gerente general de Libertador Hotels, Resorts & Spas. “Estamos encantados de volver a presentar este hotel, con su legado histórico y sus experiencias autóctonas, como parte de la marca The Luxury Collection”.
“Cusco, que durante una época estuvo reservado para los mochileros, se ha convertido en un destino ‘obligatorio’ para una nueva generación de viajeros de lujo, y estamos encantados de abrir este destino para nuestros huéspedes globales como solo The Luxury Collection puede hacerlo” agrega.
Las habitaciones
• Palacio del Inka cuenta con 203 habitaciones para huéspedes lujosamente decoradas, incluidas 17 suites en la Casa de los Cuatro Bustos.
• Las paredes antiguas aún forman parte de la estructura, en tanto que el diseño interior, las pinturas y los muebles evocan el pasado colonial del Perú.
• Las suites tienen 13 pies de altura y textiles ricos y exuberantes, y todas las habitaciones tienen puertas, cómodas y escritorios de madera tallada hechos por encargo que complementan las pinturas y espejos de época: todo celebra la personalidad distintiva del hotel y preserva su elegancia auténtica y la rica herencia del edificio.
El Spa
El spa, concebido para crear experiencias lujosas y autóctonas, ofrece un tratamiento exclusivo llamado Qoricancha, una terapia corporal revitalizadora que envuelve la piel en oro de 24 quilates, el tesoro más preciado de los incas, y da como resultado un glamoroso resplandor dorado.
Además promuebe tratamientos autóctonos, es un santuario escondido que crea una atmósfera residencial usando madera de tornillo granulada, barnizada con un verde oscuro seco en los muebles, común en las casas tradicionales del Cusco.
La gastronomía
La comida en Palacio del Inka ofrece opciones culinarias autóctonas y distintivas que gratifican los sentidos. El restaurante Inti Raymi ofrece una innovadora cocina internacional que incorpora ingredientes peruanos de estación y locales.
Se contrató a artesanos locales para la restauración de los arcos que conectan el restaurante con el patio, que está en el corazón del hotel y le da una atmósfera plena de energía para el desayuno y el almuerzo; y, para la cena, los faroles con velas crean un clima especialmente evocador.
El Rumi Bar es un ambiente extraordinario diseñado con un muro inca original en el centro.