Inspirado en la tradición de la familia Walker, que consistía en la elaboración de mezclas de whisky escocés exclusivo para reuniones privadas que nunca fueron puestas a la venta, Johnnie Walker anunció el lanzamiento del whisky escocés de Johnnie Walker Platinum Label.
La nueva etiqueta de la famosa casa, que no será una edición limitada y que costará alrededor de los 110 dólares, está dirigida a los fans de las bebidas de lujo, y se ubica en un punto destacado entre la azul y la negra.
Confeccionada a base de whiskies de grano y puros de malta, cada uno madurado durante al menos dieciocho años, Johnnie Walker Platinum Label es una mezcla compleja, delicada y ahumada que alberga capas profundas de sabor, que equilibran a la perfección el carácter diverso de las destilerías de las que proviene y la madera en que se ha añejado.
«Mezclamos Johnnie Walker Platinum Label con la intención de que sea un whisky que se disfrute con responsabilidad en los momentos de la vida que se atesorarán para siempre», asegura Jim Beveridge, el maestro mezclador, quien además recomendó beber este whisky
Beveridge extrae los whiskies de esta mezcla de un número limitado de barricas seleccionadas de entre veinte y veinticinco destilerías elegidas cuidadosamente, debido a su carácter excepcional.
Se recomienda servir Johnnie Walker Platinum Label solo o con unas cuantas gotas de agua destilada. El agua libera la riqueza del whisky de 18 años perfectamente confeccionado y libera una gama de aromas que van desde mandarinas dulces hasta almendras del bosque y crean un perfil de sabor más dulce y frutal.
Brian Radics, Director de Whisky Escocés de Diageo, dijo que «Johnnie Walker Platinum Label es el producto con el mayor lanzamiento comercial de la marca, desde la presentación de Blue Label», agregando que «ha tenido una muy buena recepción a nivel mundial. La calidad del líquido y el sabor del whisky seguirán reafirmando nuestro lugar como la marca de whisky escocés líder en el mundo.»
Johnnie Walker es la marca de whisky escocés número uno del mundo, creada por John Walker en 1820, producida por Diageo en Kilmarnock, Escocia.
Esta marca de whisky escocés se puede encontrar en más de 200 países, siendo la más distribuida del mundo, con ventas que superan los 120 millones de botellas.
