Bugatti ya puede presumir de haber creado el convertible más rápido del mundo. El fabricante de automóviles anunció que al llegar a 408,84 kmh, su Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse rompió el récord mundial de velocidad para un convertible.
La hazaña fue lograda durante una sesión en la pista de pruebas del Grupo Volkswagen en Ehra-Lessien, en Baja Sajonia, norte de Alemania, a manos del piloto chino Anthony Liu.
«Cuando introdujimos el Vitesse, establecimos el récord de velocidad en 375 kilómetros por hora. Sin embargo, no podíamos abandonar la idea de alcanzar la marca de 400 kilómetros por hora con este coche también», indicó Wolfgang Schreiber, presidente de la empresa.
El Bugatti Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse cuenta con un poderoso motor de gasolina de ocho litros W16 que desarrolla una potencia máxima de 1.200 CV; un chasis deportivo en combinación con unas suspensiones reforzadas y con una suspensión integral a las cuatro ruedas.
El coche tiene un peso reducido, gracias a la utilización de un monocasco de fibra de carbono y dispone de un spoiler trasero desarrollado específicamente para la variante descapotable.
Este increíble automóvil, que salió al mercado en 2012, tendrá una versión limitada denominada World Record Car (WRC) Edition, que contará con tan solo ocho unidades y será presentada oficialmente en el Salón del Automóvil en Shanghái la próxima semana, donde se abrirá la cartera de pedidos para el modelo. Su precio oscilará en torno a los tres millones de dólares.
