La casa Versace, presenta dos primicias en su línea de relojes, unos clásicos que renacen. Son unos relojes con piedras preciosas de una elegancia exquisita. Uno de ellos, es la versión renovada del DV One Cruise Precious, que incluye 128 piedras preciosas en el bisel: topacios amarillos, topacios rosas o topacios “Paraiba” en un increible azul verdoso.
La caja, de 43,5mm., está hecha de cerámica blanca con detalles en oro amarillo. El dial esmaltado en azul noche, rosa pastel o amarillo vainilla, y la correa de cuero con acabado de cocodrilo en azul, rosa o amarillo que agregan sofisticación muy característica de Versace. La maquinaria es de cuarzo y suiza (Ronda 5030D), como ya es habitual desde que Versace se asoció con Timex, empresa relojera americana que fabrica en Suiza, con función de cronógrafo.
La segunda novedad que presenta la firma italiana es del reloj más reciente de los Rêve, el Rêve Ceramic Chrono Black. A las ventajas del tradicional, hay que añadir un bisel de cerámica, y el color negro con toques dorados en el dial del reloj. Con el logo como estandarte, la medusa en el índice 12 e representativos detalles griegos tan Versace, el nuevo Rêve Ceramic Chrono Black en sus dos versiones, “Only Time” con 35mm de diámetro y “Cronógrafo”, con 40mm de diámetro, es un reloj ideal para los amantes usuarios de esta línea.
La garantía de Versace es su calidad impecable que apuesta por los materiales más innovadores y la renovación constante en el diseño. Claves imprescindibles para que cada pieza sea única.