El momento que inmortalizó el célebre cabezazo del jugador francés Zinedine Zidane a Marco Materazzi en la final del Mundial de Alemania 2006 provocó de nuevo polémica en Francia.
Una treintena de presidentes de distritos franceses de fútbol han pedido en una carta dirigida al mismo Zidane que exija el retiro de la estatua, ubicada frente al Museo Pompidou en París.
Los firmantes apelan al jugador para que denuncie esa obra y «ponga fin inmediatamente a ese uso negativo de su imagen», pues además emite un mensaje «en contra de la ética deportiva».
La escultura, de varias toneladas de peso y cinco metros de altura, es obra del artista argelino Adel Abdessemed, de 41 años. El artista dijo que con su obra quería mostrar «la parte sombría del héroe».
La figura de Zidane, considerado uno de los mejores jugadores franceses de la historia de es fotografiada todos los días por innumerables turistas y parisinos.
