En Alemania, en el parque temático Autostadt de Wolfsburg descubrimos un pabellón aerodinámico de acero curvado en honor a la marca de coches Porsche.
Líneas curvas y grandes dimensiones, son las características especiales de este pabellón diseñado por los arquitectos HENN. El pabellón se sitúa en la esquina del sur del parque, muy cerca de la exposición de coches y al lado de la fábrica de Volkswagen, que se sitúa al norte de la ciudad.
La estructura se sitúa a orillas de un lago, como un refugio para descansar y disfrutar de la vista. La curva del techo envuelve a la estructura y conduce al visitante a los espacios escénicos más bajos de exposición, ya que es donde sitúa la puerta por donde se puede entrar a una sala donde encontramos 25 miniaturas de plata de Porsche y algunos coches a escala natural. Una exposición muy especial donde podemos conocer la historia de la marca, como uno de los primeros Porsches de 1948.
El pabellón es de 400 metros cuadrados y alberga una gran sala de exposición. La dirección de Austandt quiere que sea la imagen del parque, el icono que lo distinga. Cubierto con 620 láminas de acero inoxidable, crea una estructura enormes dimensiones que parece estar formado de una sola pieza. Su apariencia, cambia según el clima y la luz.
Debajo del voladizo hay un espacio cubierto, conectado visualmente con el paisaje circundante del pabellón que ofrece un recinto acústico con asientos para una cantidad importantes de personas que puedan relajarse observando el lago del parque.
El estudio HENN quería crear un edificio arquitectónicamente coherente y que se fundiera con el paisaje, que fue encargado WESS, que han contextualizado la edificación en un ambiente verde.
La arquitectura se mezcla con la automoción creando estructuras tan dispares como este pabellón alemán.